Redacción El Piñero |
Minutos después de las 3 de la tarde, el pasado viernes fue atacado a balazos el presidente del Consejo Internacional de Empresarios (Coine) y su escolta.
Una cámara de circuito cerrado captó el momento en que el presidente Martín Rodríguez Sánchez y su escolta, el agente de la policía Daniel González, estaban afuera de su camioneta, y aunque al inicio de la agresión, el primero se tiró al piso para tratar de protegerse, de nada le sirvió.
Fue en la Colonia Nápoles, donde un hombre de mezclilla que llevaba una bolsa verde en la mano se les aceró por la espalda. El agente sacó su arma para encararlo, pero en ese mismo instante otro sujeto que llevaba gorra y cubrebocas llegó por el lado contrario y disparó. El escolta recibió disparos de ambos lados.
Al momento de los disparos, Martín Rodríguez se tiró pecho tierra junto a un automóvil, en minutos, el hombre de la bolsa verde rodeó el carro buscando al empresario.
Martín Rodríguez apenas se incorporaba, cuando el sujeto le disparó en la cabeza, al menos dos tiros hicieron blanco, en tanto, el sujeto de la gorra corrió al lugar en el que estaba el empresario en el piso y lo remató. Luego corrió para alcanzar a su cómplice.
Ambos hombres huyeron en una moto.
Según investigaciones, se dirigieron a toda velocidad a la zona de Iztapalapa, salieron de la Ciudad, cruzaron Nezahualcóyotl y aparentemente se perdieron entre Chimalhuacán y Texcoco.
Martín Rodríguez y su escolta, fueron llevados a un hospital. El empresario presentaba impactos de bala en el cráneo, abdomen y fémur; mientras que su escolta en la pelvis, fémur izquierdo, espalda y brazo izquierdo. Al final los dos murieron.
Hasta ahora, la Fiscalía de Justicia de la Ciudad (FGJCDMX) informó que una de las líneas de investigación analizaba la posible relación entre el corporativo que encabezaba Rodríguez Sánchez con una empresa fantasma que fue contratada indebidamente por la Secretaría de Finanzas, con la finalidad de prestarle un servicio de consultoría externa que supuestamente no se requería; esto durante la pasada administración.
En dicha investigación se señala que la dependencia contrató a la empresa fantasma y le pagó 406 millones de pesos en 2018 para la recuperación del Impuesto Sobre la Renta (ISR), pese a que dicha secretaría contaba con el personal y la infraestructura para realizar esa labor.