➡️Su patrón no le creyó y le quitó su licencia y credencial; se la devolverá hasta que pague el día.
➡️No tiene dinero para medicamentos. Y desde hace quince días orina sangre y está postrado en una cama.
➡️Su esposa dice no tener más dinero y pide el apoyo del pueblo para sanarlo.
➡️No demandó por la tardía respuesta de las autoridades.
Redacción El Piñero | Moisés Castro
Tuxtepec, Oaxaca.— A Carlos Alfonso Ortega, de 52 años, lo asaltaron con violencia el 25 de septiembre. Después, quedó abandonado entre cañales y tuvo que arrastrarse para llevar el taxi a su dueño, quien no le creyó y le quitó su licencia y credencial de elector.
Doña Eusebia Martínez Luna precisa, en entrevista con El Piñero, que su esposo fue víctima de una severa golpiza a manos de cuatro sujetos que lo despojaron de la cuenta del día y lo abandonaron entre unos cañales en el Ejido Reforma.
Aquel 25 de septiembre, cuenta, Don Carlos Alfonso, quien lleva dedicándose al oficio de taxista desde hace 25 años, estuvo ausente casi todo el día, y lograron dar con él cuando fue a dejarle el taxi a su patrón y a su relevo.
Sin embargo, precisa, al dejar el taxi marcado con el número 019, su patrón no le creyó y lo acusó de haberse gastado el dinero, por lo que le quitó su licencia y credencial de elector hasta que le pagara el día.
Posteriormente, al llegar a su casa, Carlos Alfonso le contó a su familia lo sucedido y cayó en cama, quejándose de fuertes dolores en diversas partes de su cuerpo, a causa de la golpiza de la que fue víctima.
Desde aquella fecha, refiere Eusebia, su marido orina sangre, se queja de dolores y no se levanta de la cama.
“Él se está muriendo”, narra al reportero al momento en que suplica al patrón de su esposo le devuelva su credencial.
Señala que ya no cuenta con dinero, pues lo poco que tenía se lo ha gastado comprando pañales. Y dice que por la ausencia de dinero, Carlos no ha llevado un tratamiento médico, y que la única medicina que ha tomado es Naproxeno, para aliviar los dolores.
Por tal situación, pide la solidaridad del pueblo Tuxtepecano para su marido, quien padece de diabetes y es el pilar de su hogar, a donde llevaba el pan para ella y sus tres hijos que dependen de él.
Para quien desee ayudarle, Carlos y Eusebia viven en el domicilio ubicado en el callejón 2 de la avenida México, en la colonia Nueva Esperanza de esta ciudad. Y su número telefónico es el 287 145 81 70.
