Redacción El Piñero
Oaxaca, México.- La mañana de este jueves en Santiago Xanica, municipio de la región Sierra Sur, se registró una situación de barbarie, misoginia y abierta violación a los derechos humanos luego de que autoridades municipales y un sector de la población retuvieron ilegalmente, agredieron y amenazaron con linchar a la observadora Claudia Leticia Guzmán García, integrante de la Comisión Nacional e Internacional de Organizaciones y Confederaciones de los Derechos Humanos, junto con dos personas más.
Los hechos ocurrieron alrededor de las 11:00 horas, cuando el grupo de defensores arribó a la presidencia municipal para realizar trámites relacionados con un caso que involucra violencias y falta de garantías para una víctima. Su presencia, sin embargo, detonó un acto colectivo de hostilidad extrema.
Desde su llegada, los defensores fueron recibidos con empujones, insultos, agresiones físicas y verbales, para posteriormente ser privados de la libertad sin motivo legal alguno. La tensión escaló rápidamente cuando integrantes del cabildo, apoyados por habitantes del municipio, amenazaron con lincharlos por haber ingresado a la comunidad “sin permiso”.
A las 17:43 horas, tras más de seis horas retenidos, Guzmán García y sus acompañantes lograron grabar videos con el único teléfono móvil que las autoridades no pudieron confiscarles. En esas grabaciones, los tres manifiestan temor por su vida, alertando sobre la posibilidad real de ser agredidos de manera fatal.
La observadora relató que las autoridades intentaron en repetidas ocasiones arrebatarles sus teléfonos para eliminar evidencias de los abusos, pero no lograron hacerlo del todo. En los videos se aprecia un ambiente de tensión total y un clima de violencia colectiva.
La retención de los defensores exhibe un grave patrón de misoginia, abuso de poder y violaciones sistemáticas a los derechos universales, además de un riesgo extremo para quienes acuden a comunidades a documentar o acompañar casos de violencia.
Hasta el cierre de esta nota, no existe intervención confirmada de ninguna autoridad estatal o federal, mientras los retenidos continúan en peligro.






