A través de un operativo realizado en Tlajomulco de Zúñiga, Jalisco, elementos de la Guardia Nacional (GN) ubicaron un inmueble en el que presuntamente se disolvían cuerpos en ácido. Durante estas acciones se detuvo a un grupo de media docena de personas que estaría involucrado en estos hechos.
Se informó que pobladores de la zona emitieron reportes sobre la presencia de sujetos armados en una finca ubicada en la colonia Villalta, por lo que se solicitó el arribo de las autoridades. Fue así como personal de la GN, en coordinación con agentes de la Fiscalía estatal, se trasladó al lugar indicado para corroborar los informes.
La propiedad se encontraba a dos kilómetros de distancia de la clínica 180 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y, para acceder a ella, las autoridades tuvieron que atravesar una brecha de terracería, según se aprecia en las imágenes que se difundieron del despliegue realizado.
Si bien no se registraron detonaciones de arma de fuego durante estas labores, se indicó que cinco sujetos fueron detenidos. Según reportes de Milenio, la finca había sido habilitada para disolver cadáveres en “ácido y sustancias químicas”, por lo que se presume que también estaría relacionada con la desaparición de personas.
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Además de las detenciones, los uniformados también aseguraron camionetas y motocicletas (no se detalló la cantidad). Según vecinos de la zona, era recurrente observar a personas armadas a bordo de este tipo de unidades ingresando al inmueble cateado.
El área fue acordonada por elementos de la GN y de manera extraoficial se indicó que en el predio asegurado se encontraron restos de presunta procedencia humana. Sin embargo, hasta la edición de esta nota la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJE) de Jalisco no ha emitido un informe oficial al respecto.
Por lo anterior, se desconoce el delito por el que fueron detenidas las cinco personas, así como sus respectivas identidades o lugares de origen. Será conforme a las investigaciones realizadas por las autoridades como se esclarezcan estos hechos.
Aunque no se comprobó la intervención de un grupo criminal en específico, cabe mencionar que el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) es una de las organizaciones delictivas que se ha visto involucrada en la desaparición forzada de personas en Jalisco.
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Reportes de inteligencia señalan que el crimen organizado cuenta con pequeñas construcciones para desaparecer a sus víctimas, principalmente en la zona de los Altos de Jalisco. Estos espacios, en su mayoría, son ladrilleras habilitadas como hornos clandestinos para incinerar cuerpos.
De acuerdo con Héctor Flores, miembro del colectivo Luz de Esperanza Jalisco, el narco recurre a este tipo de prácticos en municipios como Encarnación de Díaz, Jalostotitlán, Lagos de Moreno, Ojuelos de Jalisco, San Diego de Alejandría, San Juan de los Lagos y Villa Hidalgo.
“Utilizan las ladrilleras para cremar los cuerpos de las personas desaparecidas. Y esto también lo sabe la autoridad desde hace dos años y tampoco ha hecho nada”, indicó para Zeta Tijuana Héctor Flores, cuyo hijo (Daniel Flores Hernández) desapareció en Guadalajara el 18 de mayo de 2021.
El “cártel de las cuatro letras” es una de las agrupaciones relacionadas a estos métodos. Sin embargo, en el último par de años el Cártel de Sinaloa también ha implementado el uso de ladrilleras, como en Teocaltiche
