• Todos los municipios se vieron involucrados.
Carlos Abad/El Piñero
Un descomunal acarreo de votantes, que vendieron su voluntad por dinero o despensas, fue lo más sobresaliente del proceso de elección a consejeros de Morena en toda la cuenca del Papaloapan, lo que dejó sin servicio de transporte público a toda la región, ya que los empresarios rentaron casi todas sus urvans, taxis y urbanos para trasladar afiliados.
Por ende las principales entradas de Tuxtepec se vieron saturadas: caracol y Valle Nacional, además del parque La piragua, que fue el centro de la votación.
A lo descarado los operadores políticos pagaban el voto a 200 y 500 pesos, en distintos puntos y la fila de urbanos era imposible de ocultar.
Ni la lluvia impidió que los votantes se fueran, pues debían ejercer su derecho forzados por el pago y señalamientos de uno y otro lado por compra y venta de acarreados.
En Ojitlán hasta barbacoa dieron a cambio de los votos y hasta la redacción nos llegaron fotos de Cosamaloapan, Veracruz.
Todas las prácticas que se vieron hoy, provienen de “la mafia del poder”, y las realizaron quienes se decían diferentes.
