Jaime GUERRERO
Luego de su escándalo en estado de ebriedad, Melina Ponce Castelán, Coordinadora Operativa del Programa Pensión para el Bienestar de las Personas con Discapacidad
Permanente, fue despedida de la delegación de la Secretaría de Bienestar en Oaxaca, apartir de este 19 de mayo.
La coordinadora del programa para discapacitados de gobierno federal en #Oaxaca, es sobrina de la delegada de la Secretaría de Bienestar, Nancy Ortiz Cabrera.
Ponce Castelán, con actitud prepotente venía en tercer periodo de ebriedad cuando fue detenida en un puesto de control el pasado fin de semana, donde despotricó contra funcionarios estatales e insultando a las mujeres policías que le pedían que se calmara.
La delegación de Bienestar en Oaxaca, anunció que, Ponce Castelán, quien se desempeñaba como Coordinadora Operativa del Programa Pensión para el Bienestar de las Personas con Discapacidad Permanente, dejó de prestar sus servicios en la Delegación a partir de este 19 de mayo de 2025.
La Delegación de Programas para el Bienestar Oaxaca se deslindó de cualquier acción u omisión en la que haya incurrido Ponce Castelán y que contravenga los principios que
rigen el servicio público.
“Como institución del Gobierno de México, rechazamos de manera categórica cualquier conducta que atente contra la ética, la responsabilidad y el apego a la ley”, plasmó la dependencia a cargo de Ortiz Cabrera.
“Reafirmamos nuestro compromiso de seguir trabajando con honestidad, transparencia y cercanía con el pueblo, garantizando la continuidad de los programas prioritarios en beneficio de quienes más lo necesitan”.
Una vez despedida, Melina Ponce Castelán, no tuvo más remedio que presentar su “renuncia” a su tia Ortiz Cabrera:
“Por medio de la presente me permito presentar ante usted mi RENUNCIA VOLUNTARIA al cargo de COORDINADOR DEL PROGRAMA PENSION PARA EL BIENESTAR DE PERSONAS CON DISCAPACIDAD PERMANENTE, a partir de la fecha arriba mencionada, por asi convenir a mis intereses personales”, plasmó en su renuncia, tras su escándalo.
Manifestó que a la fecha no se le adeuda contraprestación alguna de ningún tipo, por lo que no se reservó acción o derecho alguno que ejercitar ni de ninguna naturaleza en el futuro, en contra de si tia la delegada ni de la Secretaria de Bienestar.
“Sin más por el momento aprovecho la ocasión para enviarle un cordial saludo”, escribió sin reconocer su error ni ofrecer una disculpa pública por su comportamiento e insultos que propinó a funcionarios estatales.