- Tribu panista contra MORENA
Luis Velázquez/ Barandal
Veracruz.- ESCALERAS: La altura de miras y la grandeza de la y en la LXV Legislatura de Veracruz se calibra de la siguiente manera:
Entre los diputados de MORENA, la bancada de la izquierda con la mayoría simple, y del PAN, intercambiaron los siguientes adjetivos calificativos:
Misóginos y clasistas.
“Las diputadas del PAN se burlan de nosotras, de MORENA, por la forma de vestirnos, de vernos y de hablar”.
Así, al menos, se estrenaron el martes 20 en la primera comparecencia de la yunicidad con el secretario de Protección Civil, el hermano del ex diputado local y federal panista, fidelista y perredista, Julio Saldaña Morán, aquel que llegaba al Congreso en su tiempo de diputado local acompañado de un mariachi entonando canciones de Pedro Infante.
“Las diputadas del PAN se burlan y cuchichean contra nosotras” dijo la legisladora Adriana Esther Martínez Sánchez y pidió a su colega Ana Míriam Ferráez (“AMLO me da asquito”, dijo en la precampaña electoral) más respeto para la investidura institucional, repitiendo la famosa frase de Adolfo Ruiz Cortines, entonces, presidente de la república.
PASAMANOS: “Las clasistas y misóginas” diputadas del PAN responden así a su prosapia y abolengo, digamos, ante algunas legisladoras de MORENA elegidas vía el método democrático de “La tómbola”, el gran invento de AMLO, el presidente electo, para dar oportunidad de un cargo público a sus huestes indígenas, campesinas y obreras.
Y ni hablar, la vida es así, en un Veracruz, por ejemplo, con un millón de indígenas, dos millones de campesinos y tres millones de obreros.
Se entiende: de igual manera como el hijo de José María Morelos y Pavón, Juan Nepomuceno Almonte (llevaba el apellido de su madre, Brígida Almonte, para evitar la excomunión del padrecito de la Patria), cabildeó la llegada de Maximiliano de Habsburgo y mamá Carlota (terminó loca), el clasicismo existe de norte a sur y de este a oeste de la república en el siglo XXI.
Y aun cuando AMLO ha dicho que “por el bien de todos, primero los pobres y los pobres entre los pobres”, las mujeres militantes de MORENA han de aceptar la realidad adversa, y lo más importante, enfrentarla.
Y como en el caso, ni hablar, sus colegas mujeres son clasistas y sus colegas hombres misóginos.
CORREDORES: Pero con todo, la noticia del choteo en la primera comparecencia de la yunicidad con el secretario de Protección Civil expresa la grandeza política, social y moral de la LXV Legislatura.
Y más, cuando el secretario Juan Carlos Saldaña Morán fue señalado como “un funcionario de escritorio” con todo y estar al frente de la Protección Civil.
Y peor, cuando evadió los cuestionamientos de algunos diputados, pasando “sin pena ni gloria” en el bienio azul.
Todavía más si se considera que a los diputados de MORENA con su pastor, el antiguo vendedor de automóviles, Javier Gómez Cazarín, se les olvidó la voluntad bíblica del góber electo de que rastreará con lupa las cuentas de cada secretaría del gabinete legal de la yunicidad, conscientes ellos de la existencia de trastupijes.
En todo caso, se les pasó investigar y escudriñar y prepararse como buenos guerreros para la comparecencia.
RODAPIÉ: Es el tiempo de la presunta rendición de cuentas. El tiempo de ajustar paradas entre el bienio azul que se va y el sexenio morenista en puerta. El tiempo de zambullirse en el manejo del dinero público.
Y con todo, el secretario de Protección Civil ya la libró con la LXV legislatura y aunque sea de panzazo pero aprobó el examen, a menos, claro, que una vez tome posesión Cuitláhuac García Jiménez y los suyos, ya instaladas en palacio y con acceso a los archivos revisen con lupa el pasado inmediato.
La historia demuestra que en cada cambio de gobierno todos los que se van son pillos y corruptos, y todos los que llegan son inmaculados y puros.
Y bajo tal lógica los Morenistas están aterrizando en palacio, con todo y que AMLO, el presidente electo, ya dijo que habrá “borrón y cuenta nueva”, porque es tanta la corrupción política que las cárceles serían insuficientes.
BALAUSTRES: Pero, bueno, así como están las cosas, todo indica que los próximos tres años en el Congreso local dominará y predominará el clasicismo y la misoginia entre los diputados del PAN y MORENA, pues en corto, algunas legisladoras azules se pitorrean de sus colegas de Morena y hacen escarnio hasta de sus fotografías en la galería de legisladores diciendo que son unas tránsfugas del metate y el brasero.
Cuidado, con sesenta indígenas y campesinos, Miguel Hidalgo inició la primera gran revolución (y transformación del país), en tanto la segunda transformación fue con el indito de Guelatao, Benito Juárez, y en la tercera, con Francisco Ignacio Madero, los inmolados en la arena pública y en el campo de batalla fueron los pobres.
Incluso en la batalla de Puebla, que dio pie para que Maximiliano de Habsburgo fuera fusilado, los campesinos fueron los más fervientes soldados.
Con MORENA y AMLO, las mujeres y hombres del campo de Veracruz llegaron al Palacio Legislativo y como sus antepasados, dispuestos a defender el espacio conquistado.
En una de esas, a las diputadas panistas que se burlan “de la forma de vestirnos, vernos y hablar” se les puede revertir.
