Minneapolis, Minnesota, 14 de junio de 2025 — El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, condenó este sábado el ataque a tiros perpetrado contra dos legisladores demócratas en Minnesota, calificándolo como un “acto terrible y dirigido” que no será tolerado en el país.
Los hechos ocurrieron en la madrugada del sábado, entre las 2:00 y las 3:35 horas, cuando individuos armados, disfrazados de policías, atacaron por separado las viviendas de la representante estatal Melissa Hortman y del senador John Hoffman.
Hortman, presidenta de la Cámara de Representantes de Minnesota, y su esposo fueron asesinados. Hoffman y su esposa permanecen hospitalizados en estado crítico, según confirmaron las autoridades estatales.
“Este tipo de violencia horrenda no será tolerada en los Estados Unidos de América”, expresó Trump a través de un mensaje difundido por su secretaria de prensa, Karoline Leavitt, en la red social X. El comunicado fue replicado por la cuenta oficial de la Casa Blanca. El presidente también envió sus condolencias a las víctimas y al pueblo de Minnesota: “¡Dios bendiga al gran pueblo de Minnesota, un lugar verdaderamente extraordinario!”, escribió.
El presidente informó que el FBI, junto a la fiscal general Pam Bondi y otras agencias federales, encabeza las investigaciones y prometió justicia: “Todo aquel implicado será procesado con el peso completo de la ley”.
El gobernador de Minnesota, Tim Walz, confirmó la muerte de Hortman y condenó los hechos como “una afrenta a la democracia”. En conferencia de prensa, hizo un llamado a la calma: “Este tipo de violencia no tiene cabida en nuestra sociedad. Es un ataque contra el corazón mismo de nuestro sistema democrático”.
De acuerdo con el Departamento de Seguridad Pública de Minnesota, las primeras investigaciones apuntan a que los agresores conocían la identidad y ubicación de los legisladores, lo que descarta que se tratara de un acto aleatorio. “Parecía que sabían exactamente a quién estaban esperando”, indicó una fuente oficial a ABC News.
El FBI mantiene presencia activa en la escena del crimen, brindando apoyo forense y operativo a las autoridades locales. Aún no se han realizado detenciones.
En tanto, organizaciones civiles como Minnesota Unidos por la Justicia exigieron mayor protección para los funcionarios públicos y advirtieron sobre el clima de polarización que, afirman, fomenta este tipo de actos. “Lo ocurrido no puede separarse del ambiente de odio que estamos viviendo”, señaló Angela Romero, vocera del grupo.
Por su parte, la fiscal general Pam Bondi declaró: “Ningún representante del pueblo debe temer por su vida al ejercer su labor democrática”.
Las investigaciones continúan mientras crece la presión pública para esclarecer este ataque que ha sacudido al estado y al país entero.