Por: Yolanda Portugal│Misión Especial
Ciudad Ixtepec. – Los mercados de Oaxaca son el reflejo de los pueblos y el de Ciudad Ixtepec no es la excepción.
Un mercado provisional que a doce meses se ha convertido en los más normal que tienen los habitantes de Ixtepec.
Pescado, camarón, totopo, son los gritos que propios y extraños escuchan al entrar en el el, esos sonidos y el ambiente, crean un contexto alejado de la realidad de la ciudad, ahí no hay casas dañadas ni escombros, no hay albañiles.
El mercado, da esperanza a los jeromeños de que se puede ver a la realidad, que el sismo destruyó su casa pero no su alegría y espíritu.
Entre colores, olores, sonidos y texturas este pueblo del Istmo no olvida su tragedia pero ha e todo lo posible por volver a la normalidad, sin olvidar el proceso para lograrla.
