Luis Velázquez/ Malecón del Paseo
Veracruz.- EMBARCADERO: Bob Woodward está de regreso…
El legendario y mítico reportero del espionaje en el edificio Watergate, de Estados Unidos, ordenado por el presidente republicano, Richard Nixon, en contra del partido demócrata, ha puesto en el carril político, social y mediático a Donald Trump…
El fin de semana publicó su nuevo libro…
Se llama “Miedo: Trump en la Casa Blanca”…
Premio Pulitzer, subdirector del periódico “The Washington Post” que lo encumbró cuando tenía menos de 25 años, autor de más de quince libros sobre temas del asunto, estremecedores todos, ha puesto en la picota al presidente de la nación más poderosa del planeta…
Y como siempre, Trump ha reaccionado descalificando al periodista más respetado del mundo…
Meses rastreando pistas, pruebas, documentos notariales, grabaciones, versiones confirmadas, hechos, diálogos en corto y por debajo de la mesa…
El periodismo en su más alta dimensión…
En 1975 cuando publicaron el libro “Todos los hombres del presidente”, que luego fue llevado al cine por Robert Redford y Dustin Hoffman, los reporteros soñaban parecerse a Woodward y a su genial colega, Carl Bernstein, y quien luego, en el camino, renunció al Post, quemó sus naves en Estados Unidos y se fue a vivir a Italia…
ROMPEOLAS: Woodward tiene 75 años…
Es una figura icónica, ejemplar, radiante, del diarismo…
En aquel entonces, Richard Nixon se fue en su contra y en contra de Bernstein, a quienes acusó de falsarios con sus fuentes informativas… Ahora, Trump repite la misma historia… Y se declara el político más honesto de todos los tiempos…
Woodward, por el contrario, ha defendido la seriedad de sus entrevistas y su trabajo y sus fuentes…
Mi libro, dijo, “está escrito con tanto cuidado como se puede hacer una excavación para ver la realidad”… Trump actúa así de igual manera que los políticos cuando se saben pillados y descubiertos en sus trastupijes…
En nombre de la república que gobiernan y en nombre de los votos obtenidos en las urnas y en nombre del país más poderoso, injurian, calumnian, difaman y pretender desacreditar a los periodistas incómodos e indeseables… “Mi información es meticulosa y cuidadosa” dice Woodward…
ASTILLEROS: En los primeros días de su mandato cuando Donald Trump asaltara la Casa Blanca, Woodward y Bernstein anunciaron su regreso… “Estamos de vuelta”, dijeron… Trump es igual, igualito a Nixon, proclamaron… Woodward ya cumplió su promesa… Es un libro y que ha enfurecido al huésped principal de la sede del Poder Ejecutivo de EU… En el libro, el afamado escritor describe al presidente como un hombre “inculto, colérico, imprevisible e incapaz, y cuyos asistentes se esfuerzan por controlar para evitar sus salidas de tono”… En tanto, la popularidad de Trump va en caída libre, hacia el despeñadero… Y oh paradojas de la vida, Woodward sigue para arriba, en ascenso, dueño de una autoridad moral que pocos, excepcionales, reporteros han tenido y tienen… Y más, cuando como en su caso, se un periodista de investigación y que, claro, solo rastrea pistas negras de los políticos…
ARRECIFES: Para su libro, Woodward entrevistó al jefe de despacho de la Casa Blanca, John Kelly, y al secretario de Defensa, Jim Mattis…
Kelly le dijo que Trump “es un idiota”…
Matis le aseguró que Trump “tiene la comprensión de un alumno de quinto o sexto grado de primaria”…
Ahora, cuando el libro circula, y Trump enfureció, los dos se desdijeron…
Woodward se mantuvo con su autoridad moral… Dijo: “No están diciendo la verdad”…
Ambos, se echaron para atrás “para proteger sus trabajos”…
El fuego se multiplicó en la Casa Blanca todavía más a propósito de que el magazine de The New York Times publicó un artículo, sin firma, de un colaborador de Donald Trump donde retrata su estado sicológico y siquiátrico y que enloqueciera por completo al presidente…
Y más, porque el mismo Kelly dijo que la Casa Blanca es “Locolandia”, el reino de un loco, un loco llamado Donald Trump, el mismito que ha contratado a trabajadoras sexuales, estrellas de películas pornográficas, portadas de la revista Playboy, y luego, ha comprado sus silencios con pago millonario…
PLAZOLETA: Cada vez se multiplica fermentada la movilidad política y social en Estados Unidos en contra de Trump…
Un loco en la Casa Blanca ha sido llamado… El peor de sus agravios es la política xenófoba y segregacionista contra los niños, hijos de migrantes sin papeles, y a los que separara de sus padres… Y no obstante el clamor universal por los derechos humanos, “El loco” de la Casa Blanca “montado en su mula”…
Incluso, la asociación nacional de siquiatras y sicólogos de EU se ha integrado para el estudio con lupa de su cerebro para que ninguna duda exista de que tiene gravísimos problemas con el tinaco mental… A la protesta se ha unido la mitad de la población y la otra mitad…
Incluso, hasta legisladores federales de su propio partido, el Republicano…
Más todavía, hasta los ex presidentes de Estados Unidos, desde George W. Bush hasta Barack Obama y William Clinton…
PALMERAS: Y, bueno, si el secretario de la Defensa y el jefe de despacho de la Casa Blanca se desmintieron de la entrevista con Woodward para su libro, la razón es la misma de todos los políticos en los 5 continentes…
Por aquí los regañó el patrón, por aquí ellos mismos se desmintieron…
Tan fácil que es, desde luego, negar que fueron entrevistados por un reportero incómodo…
La inconformidad social y política en contra de Trump crece vertiginosa, imparable, y si los mejores politólogos dudan apostando un desenlace, solo resta esperar…
Richard Nixon cayó cuando, por un lado, Woodward y Bernstein siguieron desenterrando y publicando sus trastupijes…
Y por el otro, la protesta se multiplicaba en contra de la guerra de Nixon en Vietnam…
Ya se verá…
Pero “Locolandia”, el reino de Trump está en “el ojo del huracán” con tantos estragos que el último sondeo de CNN le da apenas, apenitas, el 36 por ciento de aprobación del pueblo norteamericano…
