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El Veracruz oscuro, legado yunista

El Piñero

  • El peor de los mundos

Barandal

Luis Velázquez

Veracruz.- ESCALERAS: Se vive y padece el Veracruz oscuro.

Antes, mucho antes, Veracruz era conocido en el mundo por Agustín Lara, Toña la negra, Luis “El pirata” Fuentes, Antonio López de Santa Anna y el castillo de san Juan de Ulúa.

Luego, fue conocido por los trastupijes de Javier Duarte y Karime Macías paseando en Londres, tan quitada de la pena.

Ahora, por el reino de la impunidad.

Otra vez, la tierra jarocha, puntero nacional en feminicidios.

Y lo peor, el atropello a los derechos humanos con los crímenes de los transfeminicidas.

De la fama pública con las gordas, las picadas, los tacos parados y el arroz a la tumba, Veracruz con la fosa clandestina en Colinas de Santa Fe más grande en el continente.

Hace veinte meses, o un poquito más, Javier Duarte dejó la gubernatura.

Pero Veracruz sigue ganando titulares rojos y sangrientos en la cancha mediática.

La yunicidad heredará, entonces, el peor de los mundos.

 

PASAMANOS: Veracruz tenía un lugar y un espacio en el mundo.

Javier Duarte la soñó potencia económica. El Houston de América Latina. La potencia turística del continente. El puntero en el turismo deportivo.

Miguel Ángel Yunes Linares la soñó potencia energética luego del yacimiento descubierto en la Cuenca del Papaloapan.

También fue soñado como el centro mundial, sin precedente, de los festivales de salsa, digamos, a la altura del simple cacareo mediático de que aquí se efectúa el carnaval “más alegre del planeta”, ajá.

Pero los meses y los años han puesto cada parte en su lugar y solo queda el pitorreo sobre los sueños y las utopías descarriladas.

A: El infierno con los secuestros, desaparecidos, homicidios y fosas clandestinas que siguen apareciendo.

B: El primer nacional en feminicidios.

C: El asesinato de niños.

D: Ante tanta matazón, uno de los primeros lugares nacionales en niños huérfanos.

E: El reclutamiento de jóvenes y adolescentes como halcones de los carteles y cartelitos.

F: Algunos pueblos con virtuales Estados de Sitio apenas anochece, pues la noche es propiedad de los malandros circulando en motocicletas y sembrando el terror, el miedo “y el miedo al miedo”.

G: Luego de la inseguridad, la incertidumbre y la zozobra, la impunidad como campeona invencible en un Veracruz donde solo importa encarcelar a políticos acusados de pillos y ladrones y desaparición forzada y nombrar al Fiscal Anticorrupción y a los doce magistrados del Tribunal Superior de Justicia.

 

CORREDORES: Desencanta Veracruz. Desencanta el paraíso terrenal convertido en un infierno. Desencanta el tsunami de impunidad.

Y como escribe Denise Dresser en su libro “Manifiesto mexicano”, alarma “el encono de la sociedad producto de los pleitos incesantes entre la clase política”.

Veracruz sangra y es un valle de la muerte, mientras, y en efecto, las elites políticas disputando los cargos públicos como si se tratara de una razón superior de Estado.

De hecho y derecho, los dos años del bienio azul ya se fueron y lo que de aquí pa’lante lograra la yunicidad es oxigenar y purificar las cuentas con la química contable para evitar desaguisados con la Cuitlamiña que vendrá los próximos seis años.

 

RODAPIÉ: Nada bueno en puerta.

El gobernador electo y sus diputados locales electos han leído la cartilla.

Por ejemplo, irán por los Fiscales Jorge Wínckler y Ernesto Coronel junior, por los duartistas Gabriel Deantes y Vicente Benítez y por los caciques Renato Tronco Gómez y Ricardo García Guzmán.

Pero también, por el manchista diputado local, Sergio Hernández Hernández.

Y por una Comisión de la Verdad para revisar los agravios a los derechos humanos de los secuestrados y desaparecidos y a los familiares de los desaparecidos aglutinados en ONG como los Colectivos.

Demasiados pendientes, por lo pronto, para “quitar el sueño a más de cuatro”.

Y al momento, y por desgracia, tampoco AMLO, ni una palabra sobre la estrategia económica y social, educativa y de salud, para sacar de la pobreza “a los pobres entre los pobres” como afirma el politólogo Carlos Ronzón Verónica.

 

BALAUSTRES: El peor riesgo de todo para reconstruir el Veracruz soñado es que el grupo político, la tribu, la horda de MORENA o de los arribistas se apropien de las neuronas, el corazón y el hígado del gobernador electo, y por añadidura, ellos manden, como siempre ha ocurrido.

Y es que, de ser así, una vez más Veracruz se habrá jodido.

Bastaría precisar un dato en la lógica del profe Ronzón:

En tanto Andrés Manuel López Obrador ya nombró a su gabinete legal y hasta despidió al primero (Héctor Vasconcelos, a quien designó secretario de Relaciones Exteriores y luego enviara al Senado) y Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de la Ciudad de México, también nombró a su equipo, el góber electo de Veracruz nada de nada.

Primero, dijo que lo dará a conocer en el mes de noviembre. Después, que en octubre. Luego, que ya lo tiene listo, pero se lo reserva.

La realidad es una sola dice Roncón: Cuitláhuac García espera que el virtual presidente llegue a Veracruz en su gira anunciada para consultarle y obtener, digamos, el visto bueno.

Y por lo pronto, los días y las semanas pasan en el desgaste mediático hablando ocurrencias, sin definir una política social y económica para enaltecer la calidad de vida de los 6 de los 8 millones de habitantes de Veracruz.

Pero más aún, para combatir el par de grandes pendientes sociales como son la pobreza y la inseguridad.

Por eso se vive y padece el Veracruz oscuro sin que ninguna lucecita alumbre el largo y extenso túnel social.

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