Redacción El Piñero
Oaxaca, Mexico..- Mientras en la capital del estado se derrocha presupuesto, luces, turistas y discursos en nombre de la “hermandad de los pueblos”, en la región de la Costa la realidad es diametralmente opuesta. Aquí no hay fiesta, no hay Guelaguetza. Hay hartazgo, abandono y protesta.
Este lunes, pobladores e integrantes de organizaciones sociales instalaron un bloqueo total sobre la Carretera Federal 200, en la comunidad de El Coyul, tramo Salina Cruz – Huatulco, para denunciar públicamente dos agravios profundos como el despojo de tierras a comunidades originarias y la criminalización de líderes sociales que defienden su territorio.
Los manifestantes advierten que el paso hacia la Costa permanecerá cerrado de forma indefinida hasta que el gobierno de Salomón Jara Cruz atienda directamente sus demandas. Con una pancarta lo dejaron claro: “Aquí no hay primavera oaxaqueña, ni Guelaguetza. Aquí hay despojo y olvido”.
Y es que en medio del espectáculo folclórico con el que el gobierno presume inclusión y cultura, la represión y la indiferencia estatal siguen operando en las regiones más pobres y alejadas. Mientras turistas suben al Auditorio Guelaguetza, comunidades como las del Coyul llevan años bajando al abismo de la injusticia, sin caminos dignos, sin derechos garantizados y sin voz ante un gobierno que se dice popular, pero gobierna con soberbia.
La protesta también acusa la persecución política contra líderes agrarios y comunales que han alzado la voz contra proyectos de despojo en la Costa, y que hoy enfrentan carpetas de investigación como castigo por defender sus derechos.
Hasta ahora, no hay un solo funcionario del gabinete estatal que se haya apersonado en la zona. Ninguna comisión de diálogo. Ninguna respuesta oficial. El silencio del Palacio de Gobierno es tan denso como el asfalto bloqueado de la carretera 200.