Redacción El Piñero
La Secretaría de Agricultura de Estados Unidos (USDA) anunció este miércoles el cierre inmediato de la frontera sur al tránsito de ganado vivo, bisontes y caballos provenientes de México, tras detectarse un nuevo caso de gusano barrenador en el estado de Veracruz.
El caso fue reportado por el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA) el martes en el municipio de Ixhuatlán de Madero, lo que encendió las alertas sanitarias en ambos países. La detección ocurre apenas dos meses después de brotes similares registrados en Oaxaca y zonas del mismo Veracruz, a menos de 1,130 kilómetros de la frontera con Estados Unidos.
“El hallazgo de un nuevo caso compromete gravemente el calendario de reapertura progresiva de puertos fronterizos que habíamos iniciado el pasado 7 de julio”, señaló la secretaria de Agricultura estadounidense, Brooke L. Rollins, a través de un comunicado oficial. “Estamos tomando esta decisión con el objetivo de proteger al hato ganadero nacional y garantizar la seguridad del suministro alimentario del país”.
Retroceso en el proceso de reapertura
Tras el brote inicial del 11 de mayo, el USDA había comenzado una reapertura gradual de cinco puertos fronterizos entre el 7 de julio y el 15 de septiembre. Sin embargo, la nueva detección obliga a frenar ese proceso. Rollins subrayó que el control del gusano barrenador sigue siendo una prioridad bilateral y que no se permitirá la reactivación total del comercio de animales hasta que se observe “progreso claro y sostenido” en los estados mexicanos afectados.
“El USDA continuará colaborando con las autoridades mexicanas, pero mantendrá controles estrictos, cuarentenas, y supervisión directa en campo para garantizar que las medidas contra la plaga se estén aplicando correctamente”, añadió.
Inversión binacional y producción de moscas estériles
En paralelo a estas acciones, tanto México como Estados Unidos han reforzado su cooperación técnica. El gobierno mexicano anunció la reactivación, después de 12 años, de la planta de producción de moscas estériles en Chiapas, con una inversión inicial de 21 millones de dólares. Esta biotecnología es clave en la estrategia de erradicación del gusano barrenador.
Por su parte, el USDA informó que ya comenzó la construcción de una nueva instalación en el sur de Texas para la dispersión de moscas estériles, que servirá como centro de respuesta rápida en caso de que la plaga cruce al territorio estadounidense.
Reacción del sector agropecuario
El Consejo Nacional Agropecuario (CNA) expresó su preocupación ante las consecuencias económicas del nuevo cierre. En un breve comunicado, el organismo pidió mayor coordinación binacional y apoyo urgente para los productores afectados, especialmente en regiones donde el comercio ganadero representa una fuente clave de ingresos.