Luis Velázquez
Veracruz.- De pronto, Claudia Ruiz Massieu, senadora de la república, fue elegida presidenta del CEN del PRI, y los tolucos del estado de México y los pachucos de Hidalgo se adueñaron del búnker tricolor.
Nombraron a los secretarios generales titulares y dejaron fuera a las elites políticas de Veracruz, considerada, vaya, la tercera reserva electoral priista de la nación.
Los Carlos Salinas, los Enrique Peña Nieto y los Miguel Ángel Osorio Chong se quedaron con todas las pelotas, las últimas que según algunos está viviendo el dinosaurio rojo con sus coletazos.
Y más porque, y por ejemplo, los catorce senadores de la república del PRI caben en una combi para asistir a los eventos legislativos de su interés.
De hecho y derecho, cerraron la puerta, pues desean tener el control de todos los cabos para que ninguno quede suelto.
Así, y por dedazo superior, la orden a los comités directivos estatales del PRI en el país fue que “nadie se hiciera bolas” porque ningún cambio habría.
El manotazo se escuchó en la nación, y en Veracruz, los aspirantes y suspirantes a la presidencia del CDE del PRI, todos alborotados, igual que siempre ha sido, se disciplinaron.
Y callaron.
Y dejaron de ocuparse de la sucesión de Américo Zúñiga Martínez, incluso, y cuando él mismo se había anotado para ser elegido, pues por ahora desempeña el cargo como interino.
Fue duro el manotazo.
Con todo y que el primero de julio un tráiler de doble rodada les pasó encima y ninguna reacción partidaria se ha expresado, más que, claro, la obediencia y la sumisión total y absoluta.
Los Américo, los Renato Alarcón, los Héctor Yunes, los Víctor García Trujeque, los Juan Carlos Molina y las Érika Ayala, todos, achicados y reducidos.
Claudia Ruiz-Massieu ejecutó la orden de sus jefes, los tolucos y los pachucos, y de los que forma parte.
¡Pobre PRI!
Nunca se pusieron de la golpiza, nunca reaccionaron, y ahora, disciplinaditos.
Es parte del ADN tricolor. La sumisión.
PRIISTAS TURULATOS
En el año 2016, el PRI perdió la gubernatura de Veracruz con su candidato Héctor Yunes Landa ante el panista Miguel Ángel Yunes Linares.
Y no obstante, la goliza electoral pues significaba la primera derrota tricolor en 80 años de hegemonía roja, con Felipe Amadeo Flores Espinoza de presidente, nada pasó.
Las elites priistas, todas, fueron acomodaticias.
Si acaso llegaron a decir que estaban en la reflexión pero que nunca aplicaron, porque al año siguiente, ya con Renato Alarcón de máximo dirigente priista, el partido perdió 170 presidencias municipales.
Y de igual manera, nada pasó.
Se ignora si fue un burocratismo político de que el destino los había alcanzado…
O si sólo se trababa de soñar con tiempos mejores desde la oficina en el búnker rojo y/o desde el café…
O si quedaron tan desenchufados de la realidad y siguieron viviendo en gerundio, es decir, planeando el futuro…
El caso es que nunca reaccionaron.
Entonces, Américo Zúñiga Martínez fue encumbrado como presidente del CDE y en vez de dedicarse a la operación política se volvió dama de compañía de su amigo Pepe Yunes Zorrilla, empeñando el tiempo en defenderse de los ilícitos de que era acusado por el alcalde sucesor, el morenista Hipólito Rodríguez.
Y Pepe Yunes con Américo perdieron la elección de gobernador, el mismo día cuando el PRI ninguna diputación local y federal ni senaduría pudo ganar.
Entonces, una vez más, las cúpulas dijeron que era la hora de la reflexión y la autocrítica y la pasaron en puros rollos.
Y ahí siguen.
Así los sorprendió el nombramiento de Claudia Ruiz Massieu en el CEN y luego de la orden superior de que nadie se moviera, todos calladitos y sumisos.
LOS DINOS JAROCHOS
Por lo pronto, los dinos de Veracruz también asestan coletazos.
Por ejemplo:
El diputado federal, Héctor Yunes Landa, anda contando que formará su partido político con Alianza Generacional.
El líder estatal de la CTM, Víctor García Trujeque, también ha anunciado que formará otro partido político, primero, con las huestes obreras de la región de Orizaba y Córdoba, y segundo, con las huestes campesinas de Juan Carlos Molina Palacio, su aliado sorpresivo.
Incluso, muy machito, dijo que le vale que el PRI lo expulse.
Sorpresas que da la vida:
Luego de salirse del PRI y pasar al PAN (y en donde les fue mal), Felipe Amadeo Flores Espinoza y Mario Tejeda Tejeda, “Los Viagras” alistan su regreso, hijos pródigos, al tricolor, pues nunca fueron expulsados y todo se redujo a puras amenazas mediáticas.
Un teórico de la política dice que si un partido se mueve así como el PRI de Veracruz significa que está vivo.
En todo caso les restan dos años y medio para reintegrarse y entrar de lleno a la elección de diputados locales y federales en el año 2021.