El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este viernes que su administración comenzará a enviar cartas oficiales a decenas de países para notificarles los aranceles que su gobierno planea imponerles ante la falta de acuerdos comerciales, en un movimiento que vuelve a sacudir los mercados internacionales y amenaza con recrudecer tensiones con algunos de sus principales socios.
Desde la base aérea Andrews, en Maryland, Trump detalló que las misivas empezarán a salir hoy mismo y que cada día se enviarán entre 10 y 12 cartas con las tarifas “deseadas” por su equipo. El mandatario aseguró que para el 9 de julio, fecha en que expira el periodo de tregua de 90 días que él mismo decretó, todos los países objetivo habrán recibido su notificación.
“Podemos hacer lo que queramos. Podríamos ampliar el plazo, podríamos acortarlo. Me gustaría acortarlo. Me gustaría simplemente enviar cartas a todos. ¡Felicidades! Vas a pagar el 25%”, dijo Trump en declaraciones previas en la Casa Blanca, al referirse a sus llamadas “tasas recíprocas”.
Aranceles de hasta el 70% y un plazo limitado de negociación
Trump explicó que el valor de los aranceles oscilará entre el 10% y el 70%, aunque evitó precisar qué países estarán sujetos a los porcentajes más elevados. “Su valor variará entre, quizás, unos aranceles del 60 o 70% a unos aranceles del 10 al 20%”, detalló.
La medida supone un giro en la estrategia de la administración republicana, que durante semanas había intentado mantener abiertos canales de negociación con decenas de socios comerciales, entre ellos la Unión Europea, Japón, Brasil y Canadá. Sin embargo, Trump sostuvo que las conversaciones avanzan demasiado lento y que su prioridad es imponer tarifas de manera inmediata.
“Tenemos más de 170 países, ¿y cuántos acuerdos se pueden lograr?”, cuestionó el presidente, que describió los pactos como “mucho más complejos” de lo que había anticipado.
Un mensaje contradictorio con su propio equipo económico
Mientras Trump acelera la presión, su secretario del Tesoro, Scott Bessent, ha tratado de enviar mensajes de moderación. La semana pasada, Bessent sugirió que la administración podría ampliar el plazo de negociación hasta septiembre, sobre todo con aquellos países que presentaran avances en los acuerdos.
“Es mucho más fácil. Prefiero hacer un acuerdo simple que se pueda mantener y controlar”, comentó el secretario a Bloomberg Television, en contraste con el tono beligerante del presidente.
El propio Trump reconoció esta semana que aún espera cerrar “un par de acuerdos más” antes del 9 de julio, aunque indicó que se inclina por notificar a la mayoría de los países mediante cartas.
En mayo, un tribunal federal determinó que Trump no podía aplicar sin límite la vieja ley que respalda sus tarifas. No obstante, una corte de apelaciones permitió que las medidas sigan vigentes mientras se resuelve el litigio de fondo.
Dudas sobre el impacto económico y la inflación
Trump ha defendido que los aranceles permitirán a Estados Unidos recaudar miles de millones de dólares a partir del 1 de agosto, fecha en que empezará la recaudación formal de las tasas.
“Ese día el dinero empezará a llegar a Estados Unidos”, dijo el mandatario en tono desafiante, aunque expertos señalan que los costos de los aranceles recaen casi siempre en importadores y consumidores finales.
Por su parte, la Reserva Federal ha optado por mantener las tasas de interés en el rango de 4,25%-4,5%, pese a la presión del presidente para que se reduzcan. Trump ha criticado reiteradamente al presidente de la Fed, Jerome Powell, al que llama “el tardón de Powell”, por negarse a recortar tipos en previsión de los efectos inflacionarios de los aranceles.
Los últimos datos laborales conocidos este viernes mostraron que el desempleo cayó una décima hasta el 4,1%, una cifra que refuerza la postura de la Reserva Federal de mantener los tipos sin cambios en su próxima reunión del 31 de julio.
Incertidumbre en los socios comerciales y negociaciones contrarreloj
Hasta ahora, Estados Unidos solo ha alcanzado acuerdos comerciales sustanciales con Reino Unido, China y Vietnam. Con este último, Washington pactó que todas las exportaciones vietnamitas pagarían un 20% y algunos productos clave hasta un 40%.
El resto de las conversaciones siguen sin avances claros. Trump no aclaró si la vía de la negociación seguirá abierta una vez que los países reciban las cartas con las tarifas.
La perspectiva de aranceles tan elevados, de hasta 70%, ha generado alarma en el sector privado y en los gobiernos de países que dependen de la exportación al mercado estadounidense. Organizaciones empresariales advierten que la política comercial errática de la administración republicana podría tener efectos adversos sobre la inversión y la confianza en la estabilidad regulatoria de Estados Unidos.
NOTA: JULIO ASTILLERO https://julioastillero.com/felicidades-vas-a-pagar-trump-inicia-envio-masivo-de-cartas-con-nuevos-aranceles-a-decenas-de-paises/