➡️ Ante la oleada de comentarios negativos, la administración digital del gobernador eliminó la mayoría de los mensajes críticos, dejando solo expresiones neutras o de apoyo.
Eugenio GONZÁLEZ | El Piñero
Oaxaca, México.— La violencia que golpea al Istmo de Tehuantepec volvió a encender la indignación ciudadana.
Luego del hallazgo sin vida de una niña de cuatro años —cuyo caso estremeció a Juchitán de Zaragoza—, el gobernador Salomón Jara Cruz emitió un mensaje de condena y solidaridad. Sin embargo, la publicación en sus redes sociales se convirtió en un espacio de reclamo y furia social.
Decenas de usuarios reaccionaron con críticas y sarcasmo hacia el mandatario, recordándole su reciente declaración en la que presumía que Oaxaca es el quinto estado más seguro del país. “Lo bueno que éramos el 5to estado más seguro; tres mujeres perdieron la vida en Juchitán”, escribieron internautas bajo los hashtags #LaPrimaveraFlorece y #QueSigaLaPrimaveraOaxaqueña, usados con ironía para cuestionar el discurso oficial de seguridad y paz.
Ante la oleada de comentarios negativos, la administración digital del gobernador eliminó la mayoría de los mensajes críticos, dejando solo expresiones neutras o de apoyo.
El crimen, en el que fueron asesinadas la madre de la menor y otras dos personas, reveló una crisis de seguridad que se extiende más allá del Istmo. Ejecuciones, extorsiones, desplazamientos forzados y desapariciones son parte de una realidad cotidiana que contradice el relato de la “Primavera Oaxaqueña” promovido por el actual gobierno.
En medio de este escenario, la indignación no solo proviene de las redes; en colonias de Juchitán y otras regiones, familias han denunciado amenazas y omisiones de las autoridades ante reportes de violencia doméstica y criminal.
Mientras el gobernador insiste en proyectar fortaleza política y asegura que “Oaxaca va bien”, la evidencia en las calles, los hogares y las morgues refleja una entidad ensangrentada, donde cada semana una nueva tragedia enluta a familias enteras.






