Redacción El Piñero | Corresponsalía
Guerrero.- La carretera federal México-Acapulco fue escenario de un hallazgo que estremeció a la comunidad, el sacerdote Bertoldo P. E., reportado como desaparecido desde el sábado 4 de octubre, fue localizado sin vida la tarde de este lunes 6 de octubre, con impactos de bala y bajo circunstancias que aún son investigadas. La Fiscalía General del Estado confirmó su identidad y abrió la carpeta de investigación correspondiente, mientras la diócesis lamentaba la pérdida de uno de sus integrantes más dedicados.
Bertoldo, originario de Cocula y párroco en Mezcala, vivió sus días al ritmo de la fe y el servicio, sin embargo, su desaparición y posterior hallazgo revelan las grietas en la seguridad y la vigilancia de carreteras que deberían proteger a ciudadanos y líderes comunitarios por igual. El cuerpo del religioso fue encontrado en un tramo solitario, con signos de violencia, entre ellos impactos de bala.
Mientras tanto, la sensación de abandono se intensifica, la ausencia de prevención y monitoreo en zonas de riesgo refleja que, a veces, las autoridades llegan tarde, cuando la tragedia ya se consumó. En este contexto, la fe y la oración son lo único que queda para recordar a quien dedicó su vida al servicio, dejando en evidencia que incluso los caminos más transitados pueden volverse peligrosos sin vigilancia.