Redaccion | El Piñero
Puebla.- La tarde en el penal de Puebla transcurría con normalidad hasta que un fuerte despliegue de uniformados irrumpió en las instalaciones.
Con la presencia de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) y de la Secretaría de Marina (SEMAR), inició un operativo sorpresa que en minutos puso en tensión a internos y custodios: la misión era revisar cada rincón para detectar artículos prohibidos.
El movimiento fue intenso. La Unidad Cinotáctica K9, la Policía Estatal Custodio, el Grupo Antidisturbios y personal naval recorrieron pasillos, celdas y áreas comunes. En la inspección hallaron 77 objetos punzocortantes, 43 teléfonos celulares, 36 bocinas, 32 recipientes para consumo de sustancias ilícitas, más de 160 accesorios de telefonía, así como papel para cigarros, latas de gas butano y posible droga.
Los hallazgos fueron retirados y puestos bajo resguardo oficial.
Entre la ciudadanía quedó la pregunta inevitable: ¿cómo ingresaron esos objetos al penal? El operativo reveló fallas en los controles de seguridad previos, lo que alimentó la crítica sobre la vigilancia interna.
Las autoridades, sin embargo, aseguraron que reforzarán los filtros y continuarán con inspecciones periódicas para preservar el orden y la gobernabilidad en los centros penitenciarios del estado.
