Redacción El Piñero | Corresponsalía
La madrugada del martes 2 de julio, un incidente en San Pablo Actipan, Puebla, escaló hasta resultar en el incendio de una patrulla policial en la avenida Cuautémoc y 5 oriente. Todo comenzó cuando los residentes capturaron a un presunto ladrón que intentaba robar un vehículo. Movidos por el deseo de impartir justicia por cuenta propia, los pobladores intentaron linchar al individuo antes de que agentes policiales intervinieran para rescatarlo.
Los agentes decidieron trasladar al detenido a la comandancia municipal para su procesamiento, lo que provocó temores entre los habitantes de que el presunto delincuente sería liberado. En respuesta, un grupo de pobladores interceptó la patrulla exigiendo la entrega del sospechoso. La situación se intensificó rápidamente, desencadenando un enfrentamiento entre los policías y los residentes.
Ante la falta de una respuesta satisfactoria por parte de las autoridades, los pobladores decidieron tomar la justicia en sus propias manos y procedieron a incendiar la unidad policial en protesta por lo que percibían como una falta de acción y respuesta efectiva por parte de las autoridades locales.
