Jalisco.- Lo que comenzó como unas lluvias “normales” en Puerto Vallarta decidió tomar un tono de tragedia, el agua alcanzó hasta un metro de altura en varias colonias, anegando aproximadamente 310 viviendas y obligando a familias a mudarse temporalmente a albergues improvisados. La naturaleza, con su sentido del humor húmedo, no perdonó a Ixtapa, Cañadas, Mojoneras, Bobadilla, La Floresta, Portales y Parque Las Palmas.
El espectáculo acuático incluyó canales desbordados que convirtieron calles y domicilios en ríos de lodo, y con ellos, el caos matutino. Familias luchaban por rescatar pertenencias mientras los vecinos observaban, entre la incredulidad y el sarcasmo, cómo sus patios se convertían en embarcaciones improvisadas. Los albergues municipales, como Vida Nueva en La Lija y la Casa Ejidal de Ixtapa, recibieron a los afectados, mientras el DIF se preparaba como si esperara un nuevo diluvio a la vuelta de la esquina.
Las autoridades no se quedaron quietas y desplegaron un operativo de emergencia con más de 140 elementos de Protección Civil, Bomberos y la Sedena. Desde el Puesto de Mando Regional se coordinaron evacuaciones, rescates y limpieza, mientras se recomendaba a los ciudadanos “no acercarse a los canales” y “evitar cruzar calles inundadas”, como si eso pudiera sustituir la broma que hizo la lluvia de la mañana. “Continuamos atendiendo la emergencia”, aseguraron, en un discurso que sonó a mantra frente al agua que, por ahora, parecía reírse de los protocolos.