➡️ Rebeca también menciona que, después de conocer otros testimonios de familiares que habrían sufrido situaciones similares, tomó fuerza para alzar su voz públicamente
Redacción El Piñero
Tuxtepec, Oaxaca.– A través de una serie de historias publicadas en su cuenta de Instagram, Rebeca T., joven originaria de Tuxtepec, hizo una revelación pública de alto impacto, en la que narra haber sido víctima de abuso sexual durante su infancia y exige justicia después de más de una década de silencio.
En su testimonio, Rebeca señala que el abuso ocurrió cuando tenía 10 años, en un momento particularmente vulnerable para ella: “justamente cuando falleció mi papá Alejandro”. En sus mensajes identifica al presunto agresor como un tío de Papaloapan, a quien refiere como “Don Nacho”.
La joven relata que los abusos habrían continuado por dos años y que, con el paso del tiempo, las secuelas emocionales y psicológicas se manifestaron con fuerza: “Me empezó a afectar en la prepa, me intenté suicidar muchas veces.”
Rebeca también menciona que, después de conocer otros testimonios de familiares que habrían sufrido situaciones similares, tomó fuerza para alzar su voz públicamente: “Tengo testimonios de mi tía, de mi prima, de parte de mi mamá que me creyó. Herman@s que igual les hizo lo mismo. Así que espero se haga justicia.”
En otra parte de su declaración, afirma que jamás confió en las autoridades ni encontró un proceso que le diera protección o seguimiento: “Hasta el momento jamás se hizo justicia… espero que lo vean y se den cuenta de la persona que tienen a su lado y libre.”
La joven explica que su proceso de sanación incluyó dos años de atención psicológica, tras varios intentos de quitarse la vida. Hoy, a los 21 años, asegura estar lista para hablar sin miedo de una historia que, dice, ya no piensa cargar en silencio: “Lo que me pasó no se lo deseo a nadie.”
Su mensaje concluye con una firme postura de protección hacia sus sobrinos y familiares menores: “Jamás tendría a mis sobrinos cerca de una persona así… si ellos dicen algo, aunque sea lo mínimo, siempre les voy a creer.”
El llamado de Rebeca Trujillo —contundente, valiente y profundamente doloroso— se suma a una larga lista de voces en la Cuenca del Papaloapan que exigen un acceso real a la justicia y un sistema que no revictimice, sino que acompañe.
“Estoy lista para hablar”, escribió. Y esta vez, toda una comunidad la está escuchando.






