Redacción El Piñero | Corresponsalía
La Coordinación Organizadora de la Unidad Campesina (COUC) celebró el recién lanzado Plan Nacional de Comercialización Justa, Directa y Sustentable del Maíz, considerándolo un avance clave para el fortalecimiento del sector agrícola en México.
Sin embargo, su secretario general, Agustín Espinoza Lagunas, advirtió sobre la necesidad de institucionalizar estas iniciativas mediante una ley que garantice su permanencia y efectividad más allá de un sexenio.
Espinoza Lagunas destacó la propuesta de fijar un precio superior a seis mil pesos por tonelada para los pequeños productores, lo que representa un paso significativo hacia la dignificación del trabajo agrícola. Reiteró que la falta de un marco legal sólido ha sido una barrera que ha impedido la articulación efectiva entre producción, acopio y consumo en el sector rural.
El líder campesino también sugirió la creación de una legislación similar a la Ley Cañera, que ha proporcionado estabilidad al sector azucarero, pero adaptada a la realidad de los productores de granos como maíz, sorgo y trigo. Resaltó que este marco legal debe incluir a todos los agricultores, tanto aquellos que operan en la agricultura de subsistencia como los de producción comercial.
Espinoza hizo un llamado a las autoridades federales y al Congreso para que consideren esta propuesta y aseguren que el Plan Nacional de Comercialización no solo permanezca como una buena intención, sino que se convierta en un derecho consolidado por la ley. “La verdadera transformación del campo llegará cuando estas políticas se conviertan en derechos inalienables”, destacó.