MORELIA.- El jueves pasado, el fiscal de Michoacán, Adrián López Solís, informó que fueron 24 los cuerpos encontrados en una fosa clandestina ubicada al interior de un predio de la comunidad de Comanja, municipio de Coeneo.
Los trabajos de búsqueda de cuerpos iniciaron la tarde del martes y terminaron la noche del miércoles con el hallazgo de 24 cuerpos en alto estado de descomposición.
La mayoría de los cuerpos estaban desmembrados, decapitados o degollados; tenían de cuatro a seis meses de haber sido asesinadas las víctimas, de entre 20 y 40 años de edad.
No fueron trabajos de investigación los que dieron con ese cementerio clandestino del crimen organizado; nueve personas detenidas en Pátzcuaro revelaron la atrocidad.
Con este hallazgo, de acuerdo a las mismas palabras de López Solís, en lo que va de este año suman siete fosas clandestinas descubiertas en diferentes puntos de la entidad.
En su interior han hallado 45 cuerpos. Gran parte de las víctimas fueron tratadas con saña: torturadas, asesinadas a tiros o desmembradas.
En enero de este año se registraron en Michoacán 169 homicidios dolosos, revela el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
De ese total, 134 asesinatos fueron perpetrados con arma de fuego, 10 con arma blanca, 23 con otro elemento y dos sin especificar.
Febrero no ha sido diferente. En lo que va de este mes, en la entidad se han consumado 125 crímenes que han dejado 149 personas asesinadas.
Entre las víctimas hay seis menores de edad. El más reciente asesinato de ellos se confirmó el pasado 14 de febrero en el municipio de Jacona.
Varios sujetos armados perpetraron el ataque directo contra un niño de 12 años en la colonia Buenos Aires, donde quedó malherido de los impactos de bala que recibió. Más tarde, el niño murió en un hospital de Zamora a donde había sido trasladado para su atención médica.
Ese mismo día, un niño de cuatro años murió de varios disparos en la cabeza cuando un grupo armado disparó al vehículo en el que el menor viajaba con su papá.
Seis días antes, un adolescente de 14 años de edad fue muerto a tiros afuera de un centro de rehabilitación donde supuestamente trabajaba.
Y, el 3 de febrero, en Uruapan, el ataque armado a un establecimiento de máquinas tragamonedas, dejó un saldo de nueve muertos, entre ellos, tres menores de edad.
Aunque el saldo de ataques a corporaciones policiales ha sido menor en este año con referencia al anterior, este 2020 se incrementó exponencialmente.
Mientras en 2019 organizaciones criminales perpetraron cuatro agresiones a fuerzas de seguridad municipales, estatales y federales, en este 2020 ya van 13 ataques.
Así, es como ha iniciado el 2020 para Michoacán, donde la violencia va en aumento y sin que las estrategias implementadas hayan dado resultados.
Fuente https://lasillarota.com
