Azucena Uresti cuestiona si Noroña la espía tras difundir foto en gimnasio de Reforma; el senador insiste en que ella tiene un departamento millonario.
La confrontación entre Gerardo Fernández Noroña, presidente del Senado, y la periodista Azucena Uresti alcanzó un nuevo nivel de tensión luego de que el legislador publicara en sus redes sociales una fotografía de la conductora en un gimnasio de Paseo de la Reforma.
La publicación fue interpretada por Uresti como un intento de intimidación. En su programa de Radio Fórmula, lanzó una pregunta directa que se volvió eje del debate: “¿Me espía, senador? ¿Me está espiando?”.
La disputa comenzó después de que Fernández Noroña confirmara la compra de una casa de 12 millones de pesos en Tepoztlán, Morelos, operación que dijo financió con un crédito y con sus ingresos como senador y por YouTube.
Ante críticas sobre la incongruencia de su discurso de austeridad, el legislador respondió acusando a Uresti de tener un departamento de 13 millones de pesos en Paseo de la Reforma, más caro que su propiedad.
Sin embargo, la periodista rechazó tajantemente estas afirmaciones:
“No lo tengo. Dice mentiras…”, declaró, retando al senador a presentar pruebas.
Lejos de acudir al llamado de debate en Radio Fórmula, Noroña optó por publicar una imagen de Azucena Uresti en un gimnasio. Según el morenista, el lugar corresponde a las amenidades de un edificio exclusivo en Reforma donde, asegura, ella reside.
En respuesta, Azucena Uresti emplazó a Fernández Noroña a sostener un debate público y no escudarse en redes sociales.
“Una foto de un gimnasio no es una prueba. No vivo ahí y no es mi departamento. Venga, aquí lo espero. No sea valiente en las redes sociales, sea valiente cara a cara”, señaló.
La periodista insistió en que la publicación la pone en riesgo y lo acusó de difundir información falsa con fines políticos.
Investigación y controversia por la casa de Noroña
El tema tomó fuerza tras la investigación del periodista Jorge García, quien reveló que el senador adquirió su casa de 12 millones de pesos mediante un préstamo personal, mecanismo más costoso que un crédito hipotecario y difícil de conciliar con sus ingresos.
El propio García denunció haber recibido acoso e intentos de censura en redes sociales tras publicar la información.
Por su parte, Uresti recordó que en otras ocasiones ha aclarado que renta el departamento donde actualmente vive y que no cuenta con propiedades como las que Noroña asegura.
Debate sobre la intimidad y la política
El caso ha reavivado la discusión sobre los límites entre la vida privada y el debate público. Mientras Noroña acusa a la prensa de doble moral, Uresti defiende su derecho a ejercer periodismo sin ser blanco de intimidaciones.
En palabras de la conductora: “¿Dónde está ese departamento que usted imaginó en su cabeza que está a mi nombre?… Porque con mentiras no, con mentiras no”.
La polémica continúa abierta y ha polarizado opiniones en redes sociales, donde muchos cuestionan si la publicación de la foto constituye una forma de intimidación política contra una periodista crítica.
