Jaime GUERRERO
Oaxaca, México.- Oaxaca no ha resultado atractiva para las nuevas firmas gasolineras trasnacionales que han entrado en operaciones en el país, a partir de la liberación de los precios y la competencia que trajo consigo la reforma energética. En ocho meses, sólo tres marcas se han establecido en la entidad.
De las 250 estaciones de servicio que hay en todo el territorio, cerca de 10 cambiaron de nombre. De ser concesionarias de la marca Petróleos Mexicanos (Pemex), se cambiaron al nombre de British Petroleum y G500 en los Valles Centrales, además de Repsol en Tuxtepec.
En el país hay 38 marcas nacionales e internacionales que operan principalmente en estados de la república con alto desarrollo económico. Algunos de los cuales concentran más de diez marcas en su territorio.
Hasta marzo de este año, de las 11 mil 776 estaciones en el país, Pemex había perdido 21 por ciento de participación de mercado ante las nuevas firmas, de acuerdo con datos de la Secretaría de Energía (Sener).
“Todas las franquicias a los primeros lugares que llegan son a los estados más fuertes, grandes, en donde hay más recursos y tendrán mayor rentabilidad”, señaló el presidente de Empresarios Gasolineros del Estado de Oaxaca (EGEO), José Luis Ballesteros.
El empresario señaló que a pesar de que la entidad tiene una extensión territorial más grande que otros puntos del país, el número de estaciones de servicio es bajo porque las distancias para moverse de un punto a otro son menores, al igual que la cantidad de vehículos si se compara por ejemplo con la Ciudad de México en donde hay mil 200 gasolineras o la ciudad de Tijuana en donde son 240.
Hasta el momento, en la entidad las gasolineras sólo han cambiado de imagen, el proveedor sigue siendo Petróleos Mexicanos (Pemex) y lo que cambia son los aditivos.
Comparativamente el costo entre una estación de servicio de nueva marca y los que conservan el nombre de Pemex, son similares. Sin embargo, de acuerdo con algunos automovilistas, han percibido mejor rendimiento al cargar en BP.
Lo que ha cambiado es la percepción de la gente, la competencia inició fuerte porque con la reforma energética los precios se liberan y es en donde hay algunos centavos de diferencia en los precios.
Por lo pronto -agregó- no se tiene en puerta el ingreso de otra marca al menos en este año. “El ingreso irá siendo paulatino”.
