• Secretario de Gobierno, Jesús Romero López, la cara déspota de esta administración.
Redacción El Piñero | Corresponsalía
Oaxaca.— La intervención policial contra sindicalizados del Telebachillerato Comunitario (SUTTEBCEO) la tarde de este martes 12 de agosto, puso de manifiesto las crecientes tensiones y la fragilidad del gobierno de izquierda encabezado por Salomón Jara Cruz, de nueva cuenta, el Secretario de Gobierno Jesús Romero López, está en el ojo del huracán por la forma déspota con la que trató a los docentes. En un episodio que terminó con cinco manifestantes lesionados, la autoridad estatal optó por la represión ante un bloqueo vial que buscaba reinstalar un diálogo laboral estancado.
Altanero, soberbio y déspota, es la voz con la que se conduce Jesús Romero a la líder sindical Zurisadaí García, cómo se escucha en llamada que fue grabada y difundida en redes sociales, y a pesar de haber asegurado que le daría diálogo cuando tuviera tiempo, inmediatamente ordenó represión policiaca contra los manifestantes, demostrando la cero tolerancia que tiene el gobierno de Jara con la libre manifestación.
“Qué quieren que vaya y ahí les pida perdón, no Zuri, ya bájenle”fue el primer mensaje contón amenazante, además, Romero López aseguró que tienen que agendar la cita para poder dialogar con él. En la llamada también se le escucha decir “que te reciba hoy o quieres respuesta”, además le echó en cara a la líder sindical que no busca diálogo en primera instancia, sin embargo, Zurisadaí García inmediatamente desmintió al Secretario de Gobierno “yo acudió a través del diálogo, pero no fuí atendida, por eso se tuvo que realizar el bloqueo” -manifestación registrada en la zona centro de la capital oaxaqueña-. Lo último que dijo Romero López de manera déspota fue “quédate ahí el tiempo que quieras, si quieres hasta jueves, si no hay nos vemos”.
Los trabajadores, que han denunciado irregularidades laborales y falta de atención por parte de funcionarios como el director del subsistema, Filemón Bernardo Hernández, optaron por la protesta tras fracasar los canales institucionales. Sin embargo, la respuesta gubernamental fue una acción policiaca que disolvió la manifestación con el uso de gases lacrimógenos, evidenciando un manejo autoritario que contradice las promesas democráticas del actual gobierno.
La exigencia sindical de diálogo directo con el gobernador y su secretario de Gobierno, Jesús Romero López, subraya la desconexión entre la administración y sectores clave. Este incidente plantea serias dudas sobre la efectividad y legitimidad del proyecto político progresista en Oaxaca.