Redacción | El Piñero
El fotoperiodista y creador de contenido digital Salomón “Shalom” Ordóñez Miranda fue asesinado la noche del 23 de junio en la comunidad de Pahpatapan, en Cuetzalan del Progreso. El ataque ocurrió en la privada 15 de Mayo, cuando sujetos armados abrieron fuego en su contra. Salomón fue trasladado con vida a un hospital, pero falleció mientras recibía atención médica.
El Ayuntamiento de Cuetzalan confirmó el homicidio tras recibir una llamada anónima, y personal de la Secretaría de Seguridad Municipal junto con paramédicos acudieron al sitio. No hay reporte oficial sobre detenidos. Sin embargo, medios locales denunciaron que los servicios de emergencia tardaron más de una hora en llegar, lo que pudo haber afectado las posibilidades de salvarlo.
Salomón era fundador del medio “Shalom Cuetzalan Producciones” y se dedicaba a documentar tradiciones locales, temas comunitarios y la situación de seguridad en la región.
Diversos colectivos y organizaciones defensoras de la libertad de expresión —entre ellos Propuesta Cívica, Red Puebla de Periodistas, Artículo 19, Federación Internacional de Periodistas y RSF— exigieron una investigación con perspectiva de derechos humanos que incluya su labor periodística como posible móvil del crimen. Propuesta Cívica insistió en una “justicia pronta e imparcial”, mientras que RSF destacó que México sigue siendo uno de los países más peligrosos para ejercer el periodismo.
El gobernador Alejandro Armenta Mier manifestó su condena al atentado y sostuvo que la Fiscalía de Puebla ya investiga el caso, en coordinación con el gobierno municipal. Aún no se ha esclarecido si el crimen está vinculado directamente con su profesión o si se trató de un incidente relacionado con la criminalidad local.
Con este asesinato, ya son al menos siete los periodistas asesinados en México en lo que va de junio, según datos de la UNESCO. El gremio periodístico en Puebla y el sur de México se vuelve a ver sacudido, y la exigencia de garantías y protección queda más vigente que nunca.