Redacción El Piñero
Puebla.- La calma de la noche en Tehuacán se rompió de golpe cuando dos vehículos colisionaron en el Libramiento Tecnológico-San Marcos, justo después del Instituto Tecnológico, dejando como saldo a varias personas lesionadas y una escena de confusión que paralizó a conductores y transeúntes. El estruendo del impacto atrajo a curiosos, mientras los pasajeros heridos eran auxiliados en medio del nerviosismo.
Las sirenas de ambulancias y patrullas no tardaron en escucharse, y paramédicos se abrieron paso entre el tráfico detenido para socorrer a las víctimas. El percance, cuyas causas aún se desconocen, obligó a cerrar parcialmente la circulación, lo que derivó en un embotellamiento que se extendió hasta la madrugada. El libramiento, convertido en un improvisado corredor de emergencia, reflejaba la fragilidad de la vialidad frente a la imprudencia y la falta de control.
Sin embargo, lo que más indignó fue la respuesta tardía y desorganizada de las autoridades. Mientras los cuerpos de auxilio hacían su labor, la zona permaneció sin una adecuada señalización y sin una estrategia para redirigir el tránsito, exponiendo a otros automovilistas a nuevos riesgos. Una vez más, la ciudadanía fue testigo de que la reacción oficial llega tarde y sin contundencia, dejando la sensación de que la prevención y la seguridad vial siguen sin ser prioridad en Tehuacán.