Redaccion | El Piñero
Puebla.- San Salvador El Verde despertó la mañana del 13 de septiembre con un mensaje poco amistoso, dos personas envueltas en cobijas, con un aviso al final firmado por “El Carretas”. Al parecer, el líder regional quiso dejar constancia de que su negocio de ajustes de cuentas sigue operando sin freno, mientras las autoridades locales intentaban decidir si el mensaje era parte del decorado o realmente una pista.
El hallazgo se produjo antes de las 10:00 horas en la Junta Auxiliar de San Lucas El Grande, cuando un transeúnte tropezó con la escena en el Paraje Zopilocalco y decidió que lo más prudente era llamar a la policía. Uno de los hallazgos mostraba a la persona con las manos aseguradas y cubierta parcialmente con una bolsa, mientras ambos permanecían sin ser identificados. Elementos municipales en la unidad P-008 corroboraron la presencia de las víctimas y los signos evidentes de agresión, mientras los curiosos de la zona contemplaban la escena con la mezcla de miedo y morbo que suele acompañar a este tipo de sucesos.
En un giro que bien podría pasar por burocracia surrealista, la cartulina con la firma del grupo delictivo fue aparentemente escondida por los mismos encargados de la seguridad local, retrasando el avance de la investigación. Mientras tanto, “El Carretas” sigue operando con impunidad en la frontera de Puebla y Tlaxcala, aliándose con grupos como “Los Pipilloles” de Tlaxcala y manteniendo nexos con “La Guayaba”, cuyo líder fue detenido el pasado 22 de agosto, aunque esto no parece haber hecho mella en su influencia.
La escena deja un mensaje doble, uno, que la violencia se ha vuelto casi una postal cotidiana en la zona; y dos, que las autoridades locales parecen jugar al escondite con la evidencia, mientras los grupos delictivos dictan la agenda. Entre cobijas, cartulinas y procedimientos a medias, San Salvador El Verde se convierte en testigo de un show donde el guion lo escriben quienes operan al margen de la ley, y el público involuntario somos todos los ciudadanos.