Redacción | El Piñero
Puebla.- La protesta nacional por falta de seguridad carreteras en el Arco Norte, a unos metros de la caseta de San Martín Texmelucan, tomó un giro inesperado la noche del 24 de noviembre, cuando transportistas inmovilizados denunciaron que sus unidades fueron objeto de atracos durante el bloqueo, delincuentes les apuntaron con armas de fuego y desvalijaron sus tráilers, con total impunidad ante la falta de autoridades estatales y federales.
En la zona donde los tráileres llevaban más de 24 horas detenidos, operadores narraron que un grupo armado llegó durante la noche y se desplazó entre los vehículos sin impedimentos, ante la total ausencia de vigilancia policial.
Los testigos describieron que los involucrados se dedicaron a retirar neumáticos y diversas autopartes de, al menos, dos unidades. Todo ocurrió bajo la oscuridad del tramo, aprovechando que los operadores permanecían dentro de sus cabinas.
Al intentar intervenir, algunos conductores fueron enfrentados por los agresores, quienes portaban armas de fuego y utilizaron amenazas directas para evitar cualquier resistencia. Esto obligó a los transportistas a replegarse y mantenerse en resguardo.
Para los operadores, el episodio confirma el nivel de vulnerabilidad que se vive en distintos corredores carreteros del país. Lo que inició como una manifestación para exigir seguridad terminó convertido en ejemplo de la misma problemática que denuncian.
Ante la prolongación del bloqueo y los robos registrados, usuarios de la vía y comerciantes afectados hicieron un llamado a un acuerdo inmediato entre autoridades y transportistas, ya que el cierre ha generado demoras en la distribución de mercancías y afectaciones económicas en la región.






