Redacción | El Piñero
Puebla.- La inseguridad en el transporte público se ha convertido en uno de los retos más persistentes para las autoridades del Estado de Puebla, de acuerdo con cifras oficiales de la Fiscalía General del Estado, entre enero de 2019 y mediados de 2024 se han iniciado más de 4,300 carpetas de investigación por asaltos cometidos en diversas rutas del sistema de transporte colectivo; solo en los primeros seis meses de 2024, se contabilizaron más de 1,400 incidentes, lo que equivale a un promedio semanal de 26 atracos en distintas zonas del Estado.
Los hechos se concentran, en su mayoría, en la capital poblana, donde residen más de 1.6 millones de personas. Los reportes indican que los agresores suelen operar en grupos pequeños y utilizan armas de fuego o instrumentos punzocortantes para intimidar a los pasajeros y despojarlos de sus pertenencias. En respuesta, el gobierno estatal ha implementado el operativo “Transporte Protegido”, mediante el cual se realizan inspecciones aleatorias en unidades, y se verifica la portación de armas ilegales.
Asimismo, algunos conductores han optado por instalar cámaras de videovigilancia como medida disuasoria y de documentación, sin embargo, pese a estos esfuerzos, el fenómeno continúa agravándose, generando una creciente sensación de vulnerabilidad entre los usuarios del transporte colectivo. La Fiscalía ha emitido recomendaciones de prevención, pero la ciudadanía y expertos en seguridad coinciden en que se requieren estrategias integrales y de largo plazo que incluyan inteligencia operativa, depuración de cuerpos policiales y fortalecimiento del sistema de justicia.
La urgencia de una solución efectiva es evidente. Mientras tanto, miles de poblanos continúan expuestos diariamente a delitos que afectan no solo su patrimonio, sino también su integridad física y emocional.