Jaime GUERRERO | El Piñero
A la frase le antecedieron dos golpes secos en la mesa: “quien éste conmigo que dé un paso al frente y quien no, que se vaya, que renuncie”, sentenció el gobernador, Alejandro Murat Hinojosa.
El pasado 22 de junio por la noche, el mandatario estatal se reunió con los candidatos a diputados locales del PAN-PRI-PRD, vencedores y vencidos, para no clasificarlos como perdedores. El conclave, el Centro de Convenciones, en los rumbos de Santa Lucia del Camino. El objetivo, una especie de evaluación y reunión de cortesía con los postulados en la coalición “Va Por Oaxaca”.
Antes, se reunión con los candidatos y candidatas a diputados federales. El encuentro transcurrió sin aspavientos.
Más tarde, el mandatario estaba flanqueado por el dirigente del PRI, Eviel Pérez Magaña, la Secretaria General, Claudia Silva Fernández; la dirigente estatal del PAN, Navitidad Díaz Jiménez; el Secretario General del PRD, Raymundo Carmona Laredo.
Antes de entrar a la reunión, más de uno y una candidata del PRI, propalaban que lanzarían reclamos por presuntas traiciones de funcionarios y funcionarias que habrían operado en favor de los abanderados de Morena.
Empero, en la reunión, privaron alabanzas como la del ex titular de ICAPET, candidato por el distrito de Tlacolula, Francisco Maldonado Martínez, quien recibió gran apoyo en su campaña, al igual que Cristian Fuentes, Miriam Liborio, Francisco Silva, entre otros.
Los priístas festinaron que pasaron de 5 diputaciones en la actual legislatura a 8 para la LXV Legislatura y que Morena ya no tendría la mayoría calificada. Se auto-consolaron ante la estrepitosa caída.
Se omitieron reproches por las supuestas traiciones cruzadas de los representantes de gobierno y otros más que fueron apáticos y no ayudaron.
No obstante, no todo fue terso.
La primera en lanzar dardos fue la panista, Naty Díaz. En síntesis; “señor gobernador, digamos claro porque habría traiciones y si va ser así para analizar si es conveniente una alianza para el 2021”.
El PAN-PRI-PRD han proyectado una nueva amalgama electoral para la sucesión gubernamental en el 2022.
El perredista, Carmona Laredo, secundó y con más severidad denunció la intervención de la Guardia Nacional en el proceso electoral en favor de los candidatos y candidatas de Morena, la inseguridad que padeció y no tuvo respuesta del Estado.
De paso, sospechó que ya se entregó la plaza estatal al presidente, Andrés Manuel López Obrador y su partido Morena.
“Señor gobernador, parece que entregó el Estado a Morena. Se les hace muy fácil que el próximo año Oaxaca, deje de ser oposición y se vuelva institucional”.
“Háblenos derecho gobernador para tomar una decisión. Pensaremos dos veces si vamos a la coalición”, advirtió el polémico perredista.
Frente a lo que calificó como traiciones, sugirió al mandatario hacer un ajuste en su gabinete.
Polémico y fiel a su estilo, el priísta, “El Gato”, Gustavo Díaz Sánchez, reelecto en el cargo para diputado, le comieron las ansias electorales y sin empacho pidió al mandatario que les diera línea electoral para sucesión gubernamental, humo blanco:
“Señor gobernador, diganos de una vez quién será el candidato o candidata a gobernador del estado para saber si le entramos o no”, lanzó.
Antes, reclamó a Murat Hinojosa que careció de apoyo y el PRI no tenia nada que celebrar porque hubo muchos candidatos perdieron por falta de apoyo del Estado hacia las candidaturas del PRI.
El mandatario, escuchaba. La mirada fija. No se inmutaba. Más de un candidato y candidata derrotada escuchaba y observaba atónita al reclamo airado de “El Gato”, quien el pasado mes de octubre del 2020, destapó para gubernatura a su compadre, Alejandro Avilés Álvarez, presente en el conclave.
Avilés Álvarez, matizó y en defensa de su jefe político calificó a los presentes como “guerreros” de PRI y ensalzó a Murat Hinojosa, a quien ha calificado como el primer priísta de Oaxaca.
Para congraciarse en su futurismo electoral y ganar más adeptos prometió trabajo a los y las candidatas perdedores con posiciones del Congreso del Estado, en la LXV Legislatura.
Y sin consultar con la totalidad de su nuevo rebaño legislativo, ofreció: “la mitad de la dieta de todos los pluris”
Benítez Tiburcio, Gaby López y María Luisa Matus, sonrieron discretamente. No polemizaron, comprendieron que es fiel a su estilo polemizar.
Benítez Tiburcio, prometió desarrollo del estado y el trabajo legislativo que hará por las mujeres.
Pérez Magaña, quien entró al relevo al cuarto para las doce de la jornada electoral del 6 de junio y final pagó los platos rotos de las decisiones ya tomadas en las candidaturas, también matizó y llamó a la unidad.
El ex candidato a gobernador, omitió y evitó ventilar las exigencias de su salida de la dirigencia del PRI que ya hacen el ex candidato a senador del PAN-PRD y hoy titular de CEA, Héctor Pablo Ramírez Puga Leyva, Jorge Franco Vargas, entre otros “notados” priístas que en pasados procesos electorales han jugado las contras al PRI.
Tras alabanzas y reclamos encontrados, Murat Hinojosa, fue concreto:
“Se habla de traiciones pero yo sigo siendo priísta y no voy a dejar al PRI. Aunque digan que se ha entregado el Estado, Oaxaca va seguir siendo priísta. No dejaré que eso pase. Seguiré luchando. Quien quiera ir conmigo que de un paso adelante y quien no que se vaya”.
Luego vinieron dos golpes secos en la mesa, seguidos de la advertencia: “quien éste conmigo que de un paso al frente y quien no, que se vaya, que renuncie”.
Nadie dio un paso al frente. Será porque todos estaban sentados y frente a ellos, una mesa en herradura que se dispuso en el CCCO para el conclave.
También, testigos de la reunión, fueron los pluris del PRI, Mariana Benítez Tiburcio, María Luisa Matus, Gabriela López Pérez, hija del dirigente estatal del PRI,
Los triunfadores de mayoría, Fredy Gil Pineda Gopar y Lizbeth Concha. Ausente, el acomodaticio Samuel Gurrión Matías, quien ya propala que arrancará su gira por la gobernatura de Oaxaca, sabiendo que declinando como lo hizo ante Murat Hinojosa, gana económicamente y obtiene más prebendas.
Esa estrategia la repetirá en la sucesión gubernamental, por ambición política y económica.
Por lo pronto, los reclamos al mandatario provocaron que la reunión con los presidentes municipales electos de la coalición, PAN-PRI-PRD, se suspendiera, tras la cena de negros en la que se convirtió el conclave con los diputados locales electos y los derrotados el pasado 6 de junio.
Minutos más tarde, Avilés Álvarez, en su red social twitter, publicó una fotografia en el salón del conclave en el CCCO, flanqueado por López Pérez, María Luisa Matus, Liz Concha, y su compadres, “El Gato” y Fredy Gil Pineda Gopar.
