Connect with us

Quistes cervicales o quistes de Naboth, ¿cómo detectarlos?

El Piñero

 

Surgen por la acumulación de moco en la zona del cuello del cérvix

Los quistes cervicales son muy comunes, de hecho, se estima que más del 25% de las mujeres tiene uno a lo largo de su vida. También son conocidos como quistes de Naboth y generalmente no son malignos.

 

A continuación te decimos cómo identificarlos y qué hacer en caso de ser diagnosticada con este tipo de quistes.

 

Quistes cervicales o quiste de naboth

 

Se considera un quiste de Naboth o quiste cervical a la acumulación de moco en la zona del cuello del cérvix. No representan ningún peligro porque son considerados tumores benignos.

 

Este tipo de quistes surgen cuando la superficie cervical contiene abundantes glándulas que secretan moco. Las glándulas se cubren con el epitelio normal y se crean nidos de células glandulares, conocidas como glándulas de Naboth, que al llenarse de secreción originan un quiste cervical.

 

Los quistes cervicales son muy pequeños, miden entre 4-5 mm, son suaves y de aspecto blanco.

 

quistes cervicales

 

Cada quiste aparece como una elevación blanca y pequeña, parecida a una espinilla, que puede aparecer sola o en grupo y no es una amenaza para la salud.

 

Son consecuencia de una inflamación de los conductos excretores de las glándulas situadas en el cuello del útero, los cuáles se obstruyen por el exceso de moco.

 

>>Enfermedades de Transmisión Sexual que no conocías

 

Las mujeres en edad reproductiva son más propensas a desarrollarlos, especialmente después de un parto o un trauma en el cérvix como una cirugía cervical.

 

Después del parto, los quistes cervicales aparecen como un nuevo crecimiento de tejido en el cuello uterino. Este nuevo tejido obstruye la apertura de la glándula de Naboth en el cuello uterino y atrapa la secreción mucosa en pequeñas bolsas debajo de la piel.

 

Las mujeres menopáusicas también pueden desarrollarlos porque la piel de la cérvix se afina con la edad.

Síntomas de los quistes cervicales

 

Los quistes cervicales suelen ser inofensivos y se disuelven por sí solos. A menos que el quiste sea muy grande, no hay síntomas. La mujer puede presentar dolor en una etapa más avanzada del desarrollo de los quistes.

 

Otras señales de alerta comprenden sangrado vaginal anormal, dolor pélvico o dolor durante las relaciones sexuales.

 

Para diagnosticarlos es necesaria una revisión ginecológica de rutina, aunque en ocasiones también se detectan después de un estudio colposcópico.

 

Como son benignos, desaparecen por sí solos y no necesitan un tratamiento a menos que no desaparezcan en mucho tiempo. En esos casos es necesaria una intervención quirúrgica de electro cauterización para destrozar el quiste.

 

Si tienes dudas o notas algún cambio en tu periodo menstrual, acude a una revisión médica con tu ginecólogo para descartar cualquier problema.

(Con información de Clínica Mayo)

 

 

Comentarios

Comentarios

Comentarios

Entradas Relacionadas