Jaime GUERRERO
El rector de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (UABJO), Cristian Eder Carreño López y el grupo disidente del Sindicato de Empleados de la Universidad (SETUABJO) que lidera Enrique García, acordaron liberar las instalaciones universitarias para que desde este lunes, retomen sus clases más de 32 mil alumnos.
Esta mañana, Carreño López, acompañado del subsecretario de Gobierno, Angelino López Cortés, ingresó a las instalaciones de Ciudad Universitaria con el objetivo de entablar un diálogo con la fracción del SETUABJO.
A pesar de los reiterados llamados de la comunidad estudiantil y sindical para liberar las instalaciones universitarias, el grupo disidente del SETUABJO mantuvo secuestradas las instalaciones, afectando las actividades académicas y administrativas de la universidad.
Sin dar detalles de los acuerdos, Carreño López, precisó que a las 5 del la tarde se reanudará la mesa de negociaciones con la facción del STEUABJO, mientras tanto se reanudan las actividades en todas las instalaciones.
“Lo más importante es que los universitarios estamos retomando el rumbo, somos respetuosos y le rector siempre va a ser muy prudente de lo que estoy diciendo lo que se hace, porque no solamente afecta a la persona, sencillamente afecta casi 32,000 almas que estudian”, expuso.
Se dijo prudente respetuoso de la lucha sindical.
Preciso que el diálogo se da en los espacios correctos y adecuados.
“Queremos enfatizar que la universidad no está cerrada, no está cerrada. Los universitarios tienen que regresar a sus clases en este momento. Muchos de los directivos están aquí esperando dinámica, dado una circunstancia lamentable, pero yo creo que ha habido la prudencia de ambas partes, lo que reconozco, pero obviamente tendremos que respetar todos las reglas y las dinámicas”, cerró.
La presencia de las autoridades en el complejo de ciudad universitaria, busca destrabar el conflicto y encontrar una solución que permita la reanudación de las operaciones en la máxima casa de estudios de Oaxaca.
El rector Carreño López ha enfatizado la importancia del diálogo para resolver las demandas del sindicato, mientras que el subsecretario López Cortés actúa como mediador en este encuentro.
Hasta el momento, no se han dado a conocer detalles sobre los avances de la reunión ni las posibles soluciones al conflicto.
En asamblea extraordinaria celebrada el pasado martes, el Sindicato de Trabajadores de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (STEUABJO) tomó decisiones clave para deslindarse de la ocupación actual de las instalaciones universitarias por parte de un grupo de agremiados inconformes.
Y es que un grupo de disidentes del STEUABJO encabezados por Enrique García, tomaron Ciudad Universitaria (CU) y otras instalaciones de la UABJO como medida de protesta, exigiendo la revisión salarial, el pago de prestaciones y la reparación de contratos colectivos.
Las acciones incluyen el cierre de facultades y preparatorias, lo que ha suspendido las actividades académicas.
Sin embargo, la asamblea como máxima autoridad sindical, rechazó cualquier representación legal de los disidentes y ratificó que solo el Comité Ejecutivo 2025-2028 puede negociar con autoridades universitarias o gubernamentales.
El comunicado dirigido su compañeros sindicalizados, autoridades universitarias, el gobierno estatal y la opinión pública, la dirigencia formal establece tres acuerdos principales:
Desconocimiento de la toma y deslinde de responsabilidades.
La asamblea desconoce la ocupación en curso, argumentando que los involucrados carecen de representación legal o cargo para negociar.
La base trabajadora se deslinda de cualquier consecuencia derivada de acciones en las instalaciones tomadas.
Prohibición de uso de siglas sindicales.
Se acordó que ningún miembro puede emplear las siglas STEUABJO para obtener beneficios personales.
Plazo para liberación de instalaciones.
Los inconformes deben desalojar las instalaciones a más tardar a las 24:00 horas de este 14 de octubre.
De no hacerlo, el sindicato no los protegerá legalmente y deberán reintegrarse a sus puestos de trabajo.
Se ratifica que cualquier toma debe ser aprobada previamente por la asamblea general o una delegación respaldada por el Comité Ejecutivo.
Adicionalmente, el documento exige a las autoridades universitarias y gubernamentales que no interfieran en la vida interna del sindicato.