Redacción/El Piñero
Mérida, Yucatán. – El gobernador de Yucatán, Mauricio Vila Dosal, aseguró que mantiene contacto con la Fiscalía General del Estado (FGE) para dar seguimiento, investigar a fondo y sancionar a responsables en el caso del veracruzano José Eduardo Ravelo Echevarría, de 23 años; fallecido tras ser detenido, golpeado brutalmente y violado por presuntos policías municipales de Mérida.
El muchacho agraviado alcanzó a denunciar ante la FGE lo que le pasó. Su madre pidió justicia e interpuso una queja ante la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Yucatán (Codhey) porque además de lo que sucedió al chico con los policías, en el hospital donde murió el 3 de agosto como consecuencia las heridas, negaron la atención y le preguntaron si era gay.
Ayer 12 de agosto, el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) pidió a las autoridades investigar el caso con perspectiva antidiscriminación y de derechos humanos, determinar si hubo negligencia en el hospital y en la asesoría legal que le dieron para denunciar su caso.
En conferencia de prensa realizada este miércoles 11 de agosto, Vila Dosal dijo que “Desde que se dio este lamentable suceso he estado en contacto con el fiscal y se está llevando a cabo una investigación, como ustedes saben ya hay cuatro policías municipales detenidos que tendrán una audiencia si mal no recuerdo el día viernes”, dijo.
Agregó que “vamos a llegar al fondo de esto porque los yucatecos merecemos saber qué fue lo que sucedió y sobre todo para que este tipo sucesos no se vuelvan a repetir”. Además, informó que se reforzará la capacitación en materia de derechos humanos a los oficiales de todos los departamentos municipales del estado, así como de la policía estatal.
Por su parte, el edil de Mérida, Renán Barrera Concha dijo estar interesado en esclarecer las circunstancias en que murió el joven José Eduardo Ravelo Echevarría, en donde estás señalados cuatro policías municipales, pero dijo no anticipar juicios respecto a lo ocurrido.
El alcalde aseguró que aparentemente los hechos no ocurrieron como trascendieron a la opinión pública. En una primera entrevista sobre el caso, dijo que el muchacho fue detenido porque se recibieron dos reportes ciudadanos, a las 10:18 y 10:20 horas del 21 de julio, acusándolo de alterar el orden público en el Parque de San Juan, debido a que estaba arrojando piedras y golpeó con una persona en la cabeza quien llamó para quejarse a los patrulleros que realizaban rondín.
De acuerdo con Barrera Concha, la detención no fue arbitraria y los policías lo trasladaron inmediatamente a la sede de la comandancia para ingresarlo a la cárcel, a su llegada se le practicó un examen médico donde consta el estado físico en que se le recibió y además se tiene registrado en video cada instante que permaneció en retención, después salió por su propio pie a las 11 horas del 22 de julio. Dichas evidencias se entregaron a la Fiscalía General del Estado antes de que el joven muriera, aseguró el munícipe en una entrevista con el Heraldo Radio.
“Al menos en el material que hemos proporcionado, en ningún momento se advierte que haya sucedido lo que se denunció”, agregando que fue hasta el 24 de julio, dos días después de salir de la cárcel que el joven denunció en la Fiscalía que había sido violado y torturado por los policías que lo detuvieron.
Sin embargo, los cuatro oficiales presuntamente involucrados fueron detenidos e imputados el sábado, por lo que enfrentarán un juicio para esclarecer lo ocurrido. “Ni el gobernador, ni el fiscal, ni el presidente municipal de Mérida, ni ningún otro ciudadano se puede erigir de juez. Habrá que presentar pruebas y habrá que dirimir el asunto ante las instancias correspondientes”, destacó Renán Barrera.