El caso de María Consuelo “N”, apodada como “La mata-perros”, vuelve a generar indignación en redes sociales, luego de que se recordara que el 13 de diciembre de 2024 fue sentenciada a 2 años, 9 meses y 3 días de prisión por crueldad animal, tras un proceso que tardó más de cinco años en concretarse.
El caso salió a la luz pública originalmente en septiembre de 2019, cuando vecinos de la Unidad Habitacional Bosques de San Sebastián, en la ciudad de Puebla, irrumpieron en su domicilio y descubrieron decenas de perros vivos en condiciones deplorables, así como bolsas negras en refrigeradores con cadáveres de un perro, dos gatos y una coneja. Testimonios de activistas señalaron que María Consuelo sacrificaba animales para presuntamente usar su carne en la venta de tacos de carne enchilada.
Durante una audiencia celebrada el 19 de abril de 2024, la activista Erika Marisol Hevia recordó que al interior del domicilio se encontraron más de 45 cuerpos de animales sin vida y al menos 90 más en estado crítico, muchos de ellos desnutridos, mutilados o enfermos. “Tenía refrigeradores llenos, cajas y cubetas con restos”, narró la defensora.
A pesar de haber sido detenida en 2019, María Consuelo fue liberada poco después, ya que en ese entonces no se presentaron cargos formales por maltrato animal, pues la legislación aún no contemplaba sanciones tan específicas o contundentes. No fue sino hasta abril de 2024, cuando fue nuevamente aprehendida por la Fiscalía General del Estado, gracias a nuevas pruebas recabadas y a la presión de colectivos animalistas.
Tras su vinculación a proceso, la mujer permaneció en prisión preventiva. Finalmente, el 13 de diciembre de 2024, en una audiencia de procedimiento abreviado, recibió su sentencia: casi tres años de prisión y una multa de 275 días de salario mínimo.
Colectivos de protección animal han expresado que, aunque la sentencia representa un avance legal, el castigo es insuficiente para el nivel de crueldad y el daño causado. Además, insisten en que este caso debe sentar un precedente para endurecer las penas contra el maltrato animal en México.
El caso de “La mata-perros” sigue siendo viral cada cierto tiempo, como símbolo de impunidad y del lento avance en materia de justicia para los animales. Mientras tanto, la sociedad exige que la protección animal deje de ser una excepción y se convierta en una prioridad.