Redacción El Piñero | Corresponsalía
La planta de Volkswagen en Cuautlancingo, Puebla, se encuentra bajo una revisión estructural que podría afectar hasta 1,093 trabajadores del segmento Jetta-Tiguan.
De acuerdo con información publicada por el portal Diario Cambio, este ajuste forma parte de una estrategia global de la automotriz que planea recortar 35,000 empleos, informó en entrevista con el medio Hugo Tlalpan Luna, secretario general del SITIAVW.
Las negociaciones con la empresa buscan conocer la cifra exacta de despidos, argumentando que podría ser menor a la inicialmente reportada, menciona el líder sindical en la nota firmada por el periodista Héctor Hugo Cruz.
Los trabajadores, en su mayoría de base, representan una plantilla de alrededor de 7,200 empleados, y se proyecta que la reestructuración llevaría a la eliminación de un turno de producción.
El líder sindical también destacó que el impacto de esta disminución en la fuerza laboral podría extenderse a las proveedoras automotrices locales, generando un efecto dominó perjudicial para la economía regional.
Aunque se ha constatado que la industria ya ha perdido más de 2,295 empleos en lo que va del año, hay un esfuerzo activo por parte del sindicato para minimizar el impacto y explorar alternativas de recolocación para aquellos que pudieran ser despedidos.
A pesar de la inestabilidad actual, se tiene confianza en que la próxima llegada del modelo Golf en 2026 podría revitalizar la planta y ayudar a recuperar parte de la plantilla, ofreciendo así una perspectiva más optimista para el futuro del sector en Puebla.