Redacción El Piñero
Damaris es una joven originaria de Loma Bonita, Oaxaca, que desde hace varios años enfrenta una dura batalla contra el cáncer. Su tratamiento diario requiere una cajita de parches médicos, y cada tres días necesita además otro tipo de parches especiales para aliviar el dolor constante que sufre. A pesar de todo, Damaris sigue luchando por su vida con una valentía conmovedora.
A su lado, siempre está su madre, Magdalena Gómez Reyez, quien no ha dejado de luchar junto a ella ni un solo día. “No puedo quedarme sin hacer nada. Dios conoce el dolor que siento, pero también me sostiene. Él está con mi hija y no la deja sola”, expresa con profunda fe y esperanza.
Esta historia ha conmovido a muchas personas, y no es la primera vez que la ciudadanía de Loma Bonita se une para apoyar a Damaris. Durante años, vecinos, amigos y personas solidarias han tendido la mano para ayudarla a seguir adelante. Hoy, más que nunca, ese apoyo sigue siendo crucial.
“Mis hijos son mi vida, y lo que estoy viviendo con Damaris es muy duro. Nadie debería pasar por esto. Les pido un granito de arena; Dios se los multiplicará. Todos somos Damaris”, dice Magdalena con la voz entrecortada, pero con la fe intacta.
La historia de Damaris es un llamado a la solidaridad, a la empatía y a la acción. En momentos difíciles, la unión de una comunidad puede significar esperanza, vida y amor.