Un monumento habla de alguien que hizo algo por la historia de un pueblo, de la gente que se recuerda porque actuó sin ningún interés, sino por humanidad y amor a los demás, dijo nuestro Presidente Municipal esta mañana al recordar la inundación de 1944 donde se perdieron muchas vidas y de la que Tuxtepec resurgió.
En este 81 aniversario de la tragedia que ensombreció a Cuenca del Papaloapan se colocaron ofrendas florales a las víctimas en el Parque Cincuentenario y en el Monumento a Don Francisco Rodríguez Pacheco, benefactor e Hijo Predilecto de Tuxtepec, y donde también se contó con la presencia especial de niñas y niños del Jardín de Niños que lleva su nombre y del preescolar del Colegio Tuxtepec. Fernando Huerta destacó que las nuevas generaciones deben tener presente este momento que marcó nuestra historia pues no nos dejaron solos en medio de la angustia; recordó el apoyo inmediato del Presidente Municipal de Tierra Blanca Ernesto García Ferro, de Don Francisco Rodríguez Pacheco, de mujeres y hombres valientes que, juntos, pusieron nuevamente de pié a este gran municipio que ha actuado con solidaridad cuando otros pueblos hermanos lo han necesitado