Redaccion | El Piñero
Veracruz.- En pleno Boulevard Manuel Ávila Camacho, justo en el centro de Coatzacoalcos, la rutina de un comerciante se convirtió en pesadilla cuando dos sujetos, Evelio “N” y Gael Steven “N”, fueron sorprendidos en flagrancia al exigir el ya conocido “pago de piso”. La Fiscalía General del Estado anunció que ambos quedaron vinculados a proceso por el delito de extorsión agravada, con prisión preventiva de cajón, dentro del expediente penal 264/2025.
El sainete comenzó con un automóvil mal estacionado, obstruyendo la vialidad como si fuera espacio exclusivo. La policía, que rara vez aparece cuando se le necesita, pasaba justo por ahí en un patrullaje de rutina. Los individuos, al ver las luces, intentaron escabullirse, pero la víctima no dudó en señalarles de inmediato: “ésos son los que me exigieron dinero”. Una huida frustrada, un señalamiento directo y la historia terminó en los separos.
Lo irónico del caso es que, en una de las avenidas más transitadas y con más cámaras que un centro comercial, estos presuntos extorsionadores operaban como en terreno libre. Y ahí surge la pregunta incómoda: ¿dónde estaban las rondas preventivas antes del incidente? Porque parece que en Coatzacoalcos la justicia sólo aparece cuando los malhechores se estacionan mal, como si la estrategia de seguridad fuera confiar en la casualidad.