Redacción El Piñero | Corresponsalía
Veracruz.- Mientras las autoridades presumen coordinación entre los tres niveles de gobierno, las zonas de riesgo del municipio de Poza Rica siguen siendo territorio de maquinaria pesada, tierra removida y accesos bloqueados. Según los comunicados oficiales, todo se hace por la seguridad de la población; aunque para muchos vecinos, lo único que ha quedado a salvo es la paciencia, que ya se encuentra en etapa crítica.
El paso hacia las áreas afectadas quedó totalmente restringido, solo entran vehículos oficiales, unidades de emergencia y trabajadores con credencial visible y casco reluciente. Los particulares, en cambio, solo pueden asomarse desde lejos, con la esperanza de que su calle o colonia deje pronto de figurar en el mapa de “zona restringida”. Las autoridades insisten en que es por seguridad, pero entre los vecinos ya corre la broma de que la reconstrucción avanza con el mismo ritmo que una tortuga con permiso sindical.
Las autoridades, fieles a su estilo, agradecieron “la comprensión ciudadana” en un comunicado tan breve que parecía redactado con prisa y poca tinta. Mientras tanto, los habitantes continúan esperando que la coordinación entre los tres niveles de gobierno se traduzca, al menos una vez, en resultados que no se queden solo en los boletines de prensa.