Redaccion | El Piñero
Veracruz.- En la autopista 150D Orizaba–Puebla, justo en el tramo de Huiloapan de Cuauhtémoc, un conductor terminó sin vida al ser arrollado mientras revisaba su camioneta blanca cargada de sillas de utilería, esas mismas que en fiestas sostienen a medio pueblo, pero que aquí no sostuvieron su destino.
Según el parte extraoficial, el hombre escuchó un ruido extraño en el kilómetro 267 y decidió detenerse. Grave detalle: no se estacionó bien. Apenas bajó de la unidad, apareció un Nissan Versa blanco que lo embistió de frente, proyectándolo contra el parabrisas antes de hacerlo caer en la carpeta asfáltica, donde la tragedia se volvió inminente.
Las autoridades, como siempre, llegaron después de que el drama ya se había escrito. La Secretaría de Seguridad Pública aseguró al conductor del Versa, la Guardia Nacional hizo acto de presencia para “tomar conocimiento” y Capufe abanderó el área cuando ya todo estaba consumado. Los testigos señalan que los minutos de espera parecieron eternos, porque mientras tanto, la autopista seguía abierta al caos, con el riesgo de que la desgracia se multiplicara.