Estoy convencido de que esta pandemia puede ser la última oportunidad para despertar nuestra conciencia. No pienso darles una lección, ni mucho menos echarles un rollo de como cambiar sus vidas, sólo les voy a compartir unos tips que están confirmados por mi propia experiencia.
El cerebro humano es social, necesita la relación con otras personas, de la relación psico – afectiva con sus seres queridos, sin embargo, el confinamiento en casa o en los hospitales sin haber sido planeado, hace que el cerebro humano cambie la interpretación de las conductas, y el resultado a corto plazo es generar estrés y ansiedad.
A nivel psicológico, quedó latente el miedo al contagio, la sensación de riesgo ante personas que tienen datos clínicos de una gripe y la percepción muy marcada de incertidumbre y vulnerabilidad cuando enfrentamos a un enemigo invisible.
A nivel de la salud mental, la depresión y las crisis de ansiedad fueron las expresiones más frecuentes observadas en el confinamiento de la pandemia.
A nivel social, fue evidente el incremento en el número de divorcios y violencia intrafamiliar.
Hace unos días me puse a hojear una revista. Me detuve en una página que anunciaba un vino que desconozco. Entonces leí su eslogan, discreto, como una nota a pie de página: “Volveremos a brindar”. Se me salieron las lágrimas. Lo que necesito es a los demás. Pero, al mismo tiempo, confirmo mi amor por el individuo y mi desprecio por quienes lucran con la ignorancia de la masa. En apariencia, el 2020 no me cambió. Sin embargo, me urge que se largue para estar seguro.
Algunos tips que puedo recomendar para poder afrontar emocionalmente las fiestas decembrinas y prepararnos para recibir el 2021 son:
1.Prepararse mental y emocionalmente.
Este 2020 nos ha demostrado que todo puede cambiar de la noche a la mañana y no debemos crear expectativas.
2.Fortaleza.
Pensemos que la navidad es renacimiento y que nuestros familiares, amigos y conocidos que hemos perdido en esta pandemia han renacido, y aunque es muy doloroso y muy difícil para todos debemos tener fortaleza de que la vida sigue, y que hay personas que dependen de nosotros.
3. Nunca dejar de ser felices.
Todos podemos sacar cosas positivas de las cosas negativas, porque tenemos oportunidad de reconocer y jugar con nuestros hijos o reencontrarnos con nuestra pareja, así que podemos ser felices de una situación que nos mantiene encerrados.
4. Respeto.
Sabemos que muchas familias están haciendo trabajo en casa, así que para ellos esos horarios deben respetarse como si estuvieran saliendo de casa y yendo a su trabajo, de esa manera y guardando respeto se puede tener mayor cordialidad en casa.
5. Paciencia
Necesitamos mucha paciencia para esperar a que esto pase.
6. Tolerancia
Necesitamos la tolerancia para poder convivir con las demás personas en casa.
7. Ser agradecidos
Puede que eches la vista atrás y sean pocos los aspectos que quieras resaltar de este 2020, nunca está de más dar las gracias por estar aquí, por quienes te rodean o por lo que has conseguido avanzar.
Pronto esto va a pasar y sólo va a quedar como un mal recuerdo o a lo mejor como uno de los mejores recuerdos, eso depende de la felicidad que cada uno tenga.
A todos nos vendría bien tener algo escrito con luz que nos guíe a través del camino este 2021.
Feliz navidad y próspero año 2021. ¡Gracias!
Rubén Palacios Vidal.
