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Se llevan mas de 800 mil pesos en alhajas de oro con diamantes tras asalto a joyería Bojórquez de Veracruz

El Piñero

Una banda de delincuentes asaltó la tarde de este sábado la joyería BOJÓRQUEZ del centro de esta ciudad, con pistolas vaciaron las vitrinas y se llevaron 800 mil pesos en prendas de oro con diamantes, luego escaparon en un vehículo ante la incompetencia de la Policía Municipal.

El robo con violencia lo cometieron tres personas de sexo masculino aproximadamente a las 16:00 horas, sorprendieron a la señora Rocío N propietaria de esa negociación ubicada en la calle Francisco Canal casi esquina con el callejón Héroes de Nacozari.

No había clientes en esos momentos, la empresaria sólo estaba acompañada de su hijo y el encargado del taller de joyería, fueron amagados con las armas de fuego de grueso calibre de los ladrones, que les advirtieron “esto es un asalto, dame todo el oro o los matamos”.

Dos de los asaltantes se quedaron cuidando la entrada del establecimiento, mientras que el tercero parado en el mostrador le ordenó a la dueña que hiciera como si lo atendiera, como un cliente cualquiera para no levantar sospechas de la gente que pasaba.

En unas bolsas vaciaron los exhibidores que sacaron de las estanterías, cargaron con lotes completos de prendas de oro: pulseras, esclavas, aretes, medallas, dijes, cadenas, anillos con diamantes, todo lo que tenían en existencia.

Sin que los dejaran de amenazar de muerte, salieron con el cuantioso botín estimado en unos 800 mil pesos según apreciación de la comerciante de joyas, que prefirió obedecer las órdenes de los criminales para no salir herida.

Los tres desconocidos lograron huir ante la completa ausencia de la Policía Municipal y de la Policía Naval, encargadas de la seguridad de la zona centro del puerto, desaparecieron sin dejar rastro en un vehículo de características no identificadas.

Cuando estuvo a solas la emprendedora dama pudo solicitar el auxilio al Servicio de Atención por Llamadas de Emergencias 911, minutos después llegaron los oficiales de las corporaciones policíacas para recabar datos del suceso, pero ya era demasiado tarde.

Los responsables burlaron una vez más las cámaras del C-5i instaladas por toda la ciudad, que se supone son monitoreadas por el personal de la Secretaría de Seguridad Pública, y se mofaron del operativo de búsqueda que implementó la Policía Estatal, a cargo de la vigilancia de la zona

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